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lunes, 29 de diciembre de 2008

Retratos Hablados

Cuento de Santaclos

Por marcos Aldana

Sentado en los escalones a la puerta de Semanario me encontré a Jesús Lemus, mejor conocido como El Chukiruki. Su tristeza no hacía juego con el rojo de su traje de Santaclós.

Chuki, el prensista de la revista, entre octubre y noviembre empieza a ganar peso para disfrazarse de «Santa» y trabajar en una juguetería.

—Me acaba de poner una demanda el hermano Tony—se queja.

—Why, ¿Por qué, because?

—Me acusa de fraude religioso, usurpación de personalidad, engaño, comedia y traición.

—¡Ah, cañón!

—Lo peor es que nos vamos juicio oral, y a él lo representa un abogado del Grupo Israel, doctor en Talmud, cinta negra. Y yo quisiera que usted que la lleva bien con los curas, me recomendara uno para que me defienda.

—No, mi buen Chukiruki: si el abogado de la parte demandante es religioso, te conviene un abogado ateo.

—Pero ¿cómo un ateo me va a defender de un asunto religioso?

—Son los mejores ¿no ves que los ateos no leen la Biblia con los ojos cerrados? Toma esta tarjeta: es del licenciado Quincuagésimo Quinto, bisnieto de Quintiliano.

EL JUICIO.

En el estrado habla la jueza Mirabella, la licenciada más bella del ejido:

—Señor Chukiruki: póngase de pie: se le ha hecho comparecer a esta sala en traje de Santoclós, porque es la evidencia de que se le encontró infraganti de los cargos que le hace el Hermano Tony. ¿Se declara culpable o inocente? Yo le aconsejo que se declare culpable para pasar rápido a la posada. Hay unos tamalitos de chile en rajas, que para qué le cuento

—Y yo le aconsejo que me declare inocente para irnos más rápido todos.

—Eso lo veremos pronto. Tiene la palabra el abogado Charly Yéits.

(Entra éste, muy propio, traje negro, botonadura de plata, barba de rabino):

—Su Señoría…

—Su Señorita, por favor…

—Su señorita: mi cliente, el hermano Tony, a través del señor Chuky, demanda a Curas y Pastores, por fraude, usurpación, engaño y traición.

—¿En razón de qué?

—En razón de hacer creer a los niños que existe Santaclos y los Reyes Magos. Mi cliente durante su niñez se cansó de rogarles, se cansó de decirles que sin juguetes de plano no juega, y no quisieron escucharle. Las noches de Reyes perdió infinidad de zapatos en la ventana. Ofreció flores a una virgen que no se apareció. Además adoró a un muñeco de pasta que representaba a un Niño Dios que nunca existió.

—¿Por qué dice que nunca existió?

—Mi cliente alega que Krishna, mil años y Buda, 500 antes de Cristo, nacieron un 25 de diciembre, lo cual implica que los que se dicen cristianos los copiaron para fabricar una leyenda.

—¿Qué pruebas tiene para afirmar eso?

—El Talmud no registra la historia de un mesías Jesús. Por consecuencia todo el cristianismo, hasta Santaclós, es leyenda: no es cierto que él traiga los juguetes, ni que pueda meterse por las chimeneas.

—Señor Chuky ¿Puede usted meterse por una chimenea? En caso de que pueda, queda Vd. libre de cargos.

—Si la chimenea es de dos metros de diámetro, sí.

—¡Protesto, su señoría!

—Su Señorita…

—Protesto, su señorita: el acusado trata de sorprender al jurado: no hay chimeneas redondas, ni cuadradas de dos metros por lado. Ya ni siquiera hay chimeneas, si mucho tubos de escape de calefacción. Si él puede meterse por allí, mi cliente retira los cargos.

—¿Puede meterse por un tubo de escape, señor Chukiruki?-

Interviene un quincuagenario saco negro, pantalón gris, corbata guinda: es el licenciado Quincuagésimo Quinto, bisnieto de Quintiliano:

—Claro que sí puede, si el tubo es de su calibre. Su Señorita Mirabella, hermosa flor del ejido, ¿cree Vd. en la teoría de la relatividad?

—No estoy para contestar, sino para juzgar.

—Quiero ayudarla a juzgar para irnos a la posada ¿Cree en la relatividad?

—Bueno, sí…

—Allí está el detalle: todo es relativo: mi cliente puede entrar por donde las circunstancias lo permitan.

—No me cantinflee.

—Disculpe, pero es que Vd. me pone nervioso.

—Ay ¿qué se toma, licenciado?

—Pido la comparecencia del demandante.

—¡Orale: sale!

Baja del banquillo Chuky, y sube Tony. Lo carea Quincuagésimo.

—Señor Tony Duval ¿Por qué dice que el Niño Dios no existió?

—Lo dice Rius, el padre Freixedo y como una veintena de escritores.

—¿Qué pruebas presentan?

—Que Krishna y Buda nacieron también el 25 de diciembre…

—¿Presentan acta de nacimiento de esos profetas?

—N-no, pero eso quiere decir que les copiaron…

—¿Y usted cree que el 25 de diciembre es fecha exclusiva para el nacimiento de ellos? ¿Sabe Vd. cuántas personas en 3,500 años han nacido un 25 de diciembre?

—Bueno, muchas; pero no todas como profetas.

—Ni todos los profetas nacieron en diciembre ¿verdad? ¿Y por qué cree que Krishna y Buda sí existieron, y Jesús no? ¿No está cambiando un mito por otro, en cuyo caso cae en lo que demanda?

—Bueno, es que hay acciones paralelas entre los tres…

—¿Sabía Vd. que Plutarco escribió Vidas Paralelas, donde compara 23 parejas de biografías, entre ellas la de César con Alejandro? Y… ¿Sabe cuántos fanáticos se crucifican cada viernes santo?

—Sí, pero no hacen milagros…

—Tiene razón: ni todos los que se crucifican hacen curaciones, ni todos los que curan se crucifican. ¿Ha curado usted a alguien?

—Pongo inyecciones al sur de la espalda.

—Usted cura, pero no es Cura. Cristo convierte el agua en vino, pero no es farmacéutico. Dígame…en 3,500 años ¿no pudo haber alguien que cure y fuera sacrificado?

—¿En una cruz?

—No había silla eléctrica. Hubo miles de crucificados ¿no habría dos que tres curanderos entre ellos? ¿Cuántas curanderas acusadas de brujas fueron quema-das por la inquisición y por los fanáticos protestantes?

—Protesto, su Señoría… digo: su señorita…La defensa está llevando por otro rumbo el caso

Ha lugar. Ruego al defensor concretarse al caso.

—Quiero demostrar que si se niega la existencia de algo, se debe probar su inexistencia, lo que no hace el demandante. Si digo que en Chihuahua no existe la calle 83 es porque puedo probar que nomás llega hasta la 38. Hay una veintena de escritores que dicen que no existió Jesús ¿y sabe cuán-tos millones de lectores dicen que sí? Puesto que estamos en un país democrático, mi cliente gana por mayoría absoluta, y el Jesús que supuestamente no existía, tiene que existir a petición del respetable. Si su Mesías no nació un 25 de diciembre, hay 364 días más en los que pudo nacer. Y si los creyentes dicen que al momento del bautizo es cuando nace una persona, entonces el 25 pudo ser bautizado…

—No pudo ser bautizado en diciembre, porque se acostumbraba hacerlo en el río y el invierno es cruel. La Biblia dice que Juan lo bautizó en junio, a los 30 años…

—Dígame, ¿se puede bautizar a alguien que no nació 30 años atrás?

—¿Cómo dijo que dice?

—Supongamos que el Jesús en el que cree mi cliente no naciera, ni fuera bautizado el 25 de diciembre: pudieron haberlo registrado ese día. Nadie se llama como le pusieron hasta que su nombre no se asienta en un acta. Dígame, señor Tony Duval ¿Cuándo nació usted?-

—El 27 de Octubre.

—¿Cuándo lo registraron?

—Dos meses después…

—O seaque, por los días de navidad nació para los efectos legales. Pero como ahora es masón, nació hace tres años, que fue cuando se inició. Pero como fue muy creyente, «nació para el Espíritu» al ser bautizado. Y como también fue adventista, vino al mundo al momento de la concepción. Quizás lo trajeron los Reyes Magos, porque los que nacen en octubre fueron encargados en enero. Su Señorita: ruego a usted cuente con los dedos.

La jueza cuenta (1,2,3,4…) y dice:- Ha lugar: efectivamente son nueve meses…

—Lo que trato de demostrar, su Señorita, son dos cosas: que usted es inteligente y está tan plena como la Magdalena, y…

—Protesto, su seño…

—¡Guarde silencio!...Prosiga, licenciado…

—… y que los nacimientos son relativos a las creencias y metáforas. Si hay profetas anteriores a Jesús, las mitologías registran otros moiseses arrojados al río. Porque si a esas vamos, si Jesús no existió, tampoco Moisés.

—Protesto, su señoría: el defensor se está metiendo con una creencia sagrada instituida mucho antes que el cristianismo.

—Licenciado, usted más que rabino parece protestante. Licencia-do Quincuagésimo: no se cuestiona la existencia de Moisés, sino la de Jesús, de donde viene la Navidad y Santoclós. Concrétese al caso.

—Demostraré no sólo la existencia de los personajes en que cree mi cliente, sino la del profeta en que cree el licenciado Yéits. Señores del jurado, chiquillos y chiquillas: ¿creen en la expresión de «por sus frutos los conoceréis»? Respondan en voz alta.

—¡Sí creemos!—en coro.

—Por consecuencia, si les de-muestro los milagros de Moisés, Jesús y Santaclós, ¿darán por hecho su existencia?

—¡Yesss en inglés!

—¿No les parece un milagro que el pueblo judío siga unido, después de tanta diáspora, persecu-ciones y metidas de pata de sus guías, que dicen que Israel es el pueblo de Dios, y que las demás naciones son pueblos de segunda? Repito, ¿no es un milagro para ese pueblo maravilloso que es el judío?

—¡Sííí: ese es un verdadero milagro!

—Y que la gente siga creyendo, después de soportar tanto papa bribón, que la Iglesia llama «antipapas»; que después de siglos de Inquisición, de matanzas entre católicos y protestantes, y que pese a eso y algo más ¿No les parece un verdadero milagro que el cristianismo perdure y siga creciendo?

—¡Sííí, ese es un verdadero milagro!!!

—Pues esas doctrinas, a prueba de tanta barbaridad, son los frutos de los árboles que plantaron Moisés y Jesús.

—¡Aaah: es cierto!!— (aplausos que Yéits acalla con un ademán, para decir):

—Sólo que hay un detalle, licenciado: los acusados no son Moisés ni Jesús, sino Santaclós. Ya sabemos que el Chuki no hace milagros. Ahora demuéstrenos que el personaje que él imita sí los hace.

—La mente, señores del jurado, evoluciona en 4 etapas, como se abre una espiral de Arquímedes: a los bebés se les dice que el Niño Dios trae los juguetes. A los niños, que es Santoclos el werever. Los adultos saben que Santoclos son ellos. Y ya avanzada su inteligencia, comprenden las metáforas de mitologías y religiones. La mente de Tony Duval se quedó en el pasado. Mi cliente no es impostor, ni imitador: es un in-duc-tor…

(Murmullos en la sala que calla la Jueza con tres mazazos)

—¡Orden, orden!

—Es un inductor porque induce a los adultos a la generosidad. Santoclós es un espíritu que como tal tiene el don de la ubicuidad, por eso en una noche visita millones de casas en forma simultánea…

(Nuevos murmullos que la jueza acalla levantando la mano)

—…Y las cálidas arterias son las chimeneas por donde entra a nuestros corazones, para hacer de cada creyente un Santaclós. Por eso… «¡no preguntes dónde está Santaclós: Santaclós eres tú! ».

(La jueza Mirabella enjuga una lágrima)

—Mucha retórica; pero es el caso de que mi cliente estuvo perdiendo un zapato cada noche de Reyes.

—Bueno, es que los Reyes aho-ra no dan; quitan: cuando no te quitan lo del predial, te cargan de más el recibo de la Junta de Aguas…

—¡Orden, orden! Mi veredicto es que el Chuky por hacerse pasar por quien no es, le deberá imprimir tres mil tarjetas gratis al Hermano Tony; éste le pagará un viaje a Belén al licenciado Yéits, y el licenciado Quincuagésimo me deberá sacar a bailar toda la posada. Ahora, señores del jurado, repitan conmigo: ¡Feliz Año Nuevo!

—¡Feliz navidad!!s

( Música de José Feliciano, y la sala se convierte en fiesta)

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