Luego de cuatro años de colaborar, de facilitar las políticas implementadas por Felipe Calderón, el Partido Revolucionario Institucional, rompe con Los Pinos y el marco formal de la ruptura es la reunión de la bancada del PRI en Ixtapan de la Sal, en donde adelantan la disminución del IVA del 16 al 15 por ciento ya que «existen subejercicios y mala aplicación de las leyes tributarias».
Aseguran que bajar un punto la tasa del IVA no afectará las finanzas públicas pues «hay recursos millonarios que no se han ejercido y además el Servicio de Administración Tributaria no aplica correctamente el marco legal vigente, con lo que hay una gran evasión». También se promoverá bajar el IVA en las zonas fronterizas que pase del esquema actual de 11 por ciento a 10 por ciento. Afirmó el líder de la bancada mayoritaria Francisco Rojas.
Es el fin de una etapa de colaboración que inició el primer día de gobierno de Calderón Hinojosa, cuando gracias a la participación de los priistas, pudo entrar a la Cámara y a las carreras entrar por la puerta trasera a la tribuna y en una ceremonia de dos minutos tomar posesión,
En una acción que podría calificarse de guerra de guerrillas, echaron a andar procedimientos que sólo pueden ser interpretados como el inicio de un abierto rompimiento con el régimen de Felipe Calderón.
Es un síntoma de que ya se inició el proceso de sucesión presidencial y cuando todos advierten que Calderón busca reposicionarse por la vía de las alianzas que ya dieron frutos en Oaxaca, Puebla y Sinaloa.
Por lo pronto el mexiquense Francisco Rojas advirtió que los priístas están sumamente agraviados por Calderón y los aliancistas y que eso se reflejará directamente en la negociación y aprobación del próximo presupuesto de Ingresos y el presupuesto de Egresos para 2011.
Los priistas consideran que llevar a los candidatos aliancistas perdedores en Veracruz, Miguel Ángel Yunes; en Hidalgo, Xochitl Gálvez y en Durango, José Rosas Aispuro a la sesión de la Comisión Permanente bajo el abrigo de los coordinadores del PAN en el Senado y la Cámara de Diputados, Gustavo Madero y Josefina Vázquez Mota respectivamente, y del coordinador de los perredistas azules Carlos Navarrete, es un reto a las instituciones y un agravio contra el PRI.
Sobre lo anterior dijo Francisco Rojas: «no propicia un clima adecuado para los acuerdos, profundiza las diferencias, dinamita los puentes de comunicación y cancela las vías de entendimiento y cooperación».
El líder de los diputados priistas advirtió así que los 236 diputados del PRI junto con los 21 de sus aliados del PVEM podrían sacar esta vez adelante un presupuesto que no sería del agrado de presidente Felipe Calderón.
En el discurso priista se pregunta ¿Cómo se logrará que el presupuesto de Egresos sea el motor de la recuperación? Se responde: Dándole un gran énfasis al gasto en infraestructura y en aquellos detonadores de crecimiento de actividad económica, de actividad empresarial y generación de empleos.
«Un Presupuesto que tuviera un énfasis en el gasto corriente, como lo han hecho las administraciones panistas desde el año 2000, sería un Presupuesto muy inoportuno e inaceptable», aseguraron en la reunión de Ixtapan de la Sal.
Se adelantó que se someterá al Gobierno Federal a una gran austeridad y a un recorte sustancial del gasto corriente e impondrán reglas claras para acabar de una vez con los subejercicios al gasto de obra pública. Es decir, la declaración de guerra a través de imponerle a Calderón un presupuesto de Ingresos muy rígido y acotado y un presupuesto de Egresos sin posibilidad de maniobra.
Por otra parte y cerrando la pinza, en la Cámara de Senadores los priistas anunciaron su intención de ir con todo para aprobar su Reforma Política al inicio del próximo período de sesiones que comienza en un mes.
Esta reforma prevé, enumeró el senador priista Fernando Castro Trenti:
-Restituir la obligación del presidente de la República a rendir personalmente su informe anual de labores ante el Congreso, asistir.
-Que con excepción de los titulares de la Defensa y Marina, todos los demás que componen el Gabinete Presidencial sean examinados y ratificados por el Senado, incluidos los titulares de Pemex, Conagua, Cisen, Cofetel y Cofeco entre otros.
-Que diputados federales y locales puedan ser reelegidos por dos períodos más para cumplir nueve años en el cargo mientras que los senadores sólo lo sean un período para cumplir 12 años.
-Que de 128 senadores se disminuya a 96, al quitar a 32 de los llamados «pluris» mientras que de 500 diputados federales baje a 400 al reducir 100 de los de representación proporcional.
-Que se dé autonomía a la PGR, para que el procurador y los ministerios públicos federales ya no dependan del Presidente de la República.
-Que la facultad de investigar casos graves de las garantías individuales pase de la Suprema Corte a la Comisión de Derechos Humanos.
-Que se establezca la iniciativa ciudadana, el referéndum y el plebiscito y que se defina con claridad la sustitución del Presidente de la República, en caso de retiro o ausencia definitiva.
En fin, está echada a andar la maquinaria priista legislativa, para no sólo acotar el poder del Presidente de la República, sino para modernizar el aparato de gobierno.
El nuevo líder de la Cámara de senadores Manlio Fabio Beltrones, ha recorrido en los últimos días los medios de comunicación con cobertura nacional y ha insistido en que es urgente poner orden en todos los renglones de la administración federal y que desde las Cámaras los priistas se darán a la tarea.
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