Por Rodrigo Borja
Los titulares de la prensa nacional fueron para
el ríspido enfrentamiento que esta semana sostuvieron en el Senado el
gobernador César Duarte Jáquez y el senador por Chihuahua Javier Corral Jurado;
sin embargo, Jaime García Chávez, afirma que la demanda interpuesta por el 23
de septiembre de 2014, sigue su curso.
Mientras
la prensa nacional se ocupaba del discurso de Corral Jurado en la Cámara de Senadores,
luego de la comparecencia del gobernador César Duarte ante los legisladores
para hablar sobre seguridad y justicia, que derivó en la apenas velada
acusación del gobernador chihuahuense de que el senador se oponía a su gobierno
por defender intereses del narcotráfico en la frontera y para respaldar su
dicho, mencionó que uno de sus hermanos había sido detenido por el delito de
narcotráfico en la frontera y otro más por fraude bancario. El gobernador, por
cierto apenas con un contenido coraje y evidente nerviosismo no respondió a las
acusaciones de enriquecimiento inexplicable, uso abusivo del poder y de
atribuciones, y en cambio arremetió contra los hermanos de Corral Jurado, quien
en conferencia posterior, calificó la acción de bajeza.
Ante
el silencio de los medios de comunicación más importantes de la entidad, la
opinión pública se expresó a través de las redes sociales y aun cuando más de
uno calificó la acción del gobernador en la tribuna del Senado como necesaria,
«para poner a Corral en su lugar», fue abrumador el número de mensajes que
hablaban de «patadas de ahogado».
La demanda
camina
Precisamente en
las redes sociales, en donde se está librando la batalla de Unión Ciudadana que
busca la salida de César Duarte del gobierno estatal para que responda a la
demanda penal interpuesta en su contra para que demuestre de dónde sacó los 65
millones de pesos para constituir el fideicomiso 744743 de Banorte, con la
instrucción de comprar acciones del Banco Unión Progreso, en proceso de
constitución, fue donde se expresó Jaime García Chávez, de una manera sencilla
y contundente:
«ESCÁNDALO
DUARTE. Mientras son peras o son manzanas, el expediente contra Cesar Duarte
fue formalmente remitido el día de hoy 22 de enero de 2015 a la Unidad
Especializada Análisis Financiero de la PGR en la ciudad de México, según
formal notificación que me hicieron en mi oficina a la 13:15 horas. El tirano está
bajo investigación, diga lo que diga. El pueblo de Chihuahua, a final de cuentas,
tiene la palabra: quiere su libertad completa o soporta que lo aplasten
miserablemente. ¿Valen los ciudadanos de Chihuahua menos que Peña Nieto o
Gamboa Patrón? Unión Ciudadana es la palanca para triunfar». Esta publicación
en el muro de Facebook de García Chávez se «subió» sólo unas horas después del
choque entre Duarte y Corral en el Senado.
En otra de su publicaciones García Chávez dice: «César Duarte ha
hecho correr la versión, cuando menos en dos ocasiones, de que la Procuraduría
General de República le dará carpetazo a la investigación que por corrupción
política se le sigue por el escándalo del Fideicomiso que firmó sin leer y todo
lo relativo a Unión Progreso y la responsabilidad que les puede tocar, tanto a
Jaime Herrera como a Carlos Hermosillo. Ahora propala que es inminente –y hasta
probablemente en estos días– cuando se decrete su impunidad. Legal y
procesalmente esto no es posible y así hay que tenerlo en claro. Empero, no
está de más recordar que el pacto de corrupción e impunidad en el que se
sustenta el actual gobierno de Peña Nieto, probablemente esté apretando las
tuercas para que no suceda nada en este ámbito, casi un compromiso de sangre
entre lo peor de la clase política que ejerce el poder en la república».
Ante
la cerrazón de los medios García Chávez expresa en las redes su apoyo al
senador chihuahuense. «No me extraña en
lo más mínimo que para atacar tu desempeño se recurra a los más burdos oficios
de un parlamentarismo ruin y ramplón como el de César Duarte, al que conozco de
cerca en dichas habilidades por haber compartido legislatura aquí en el estado
de Chihuahua, sobre todo cuando salió en defensa abyecta de Patricio Martínez,
con sofismas del tamaño del iceberg que dañó al Titanic. Con franqueza te
quiero decir que sé de cierto que los cuestionamientos a los familiares duelen,
sobra decirlo, más tratándose de personas que no tienen por hábito negar sus
vínculos consanguíneos. Duelen y punto. Pero no trascienden a la vida personal
del otro, así tengan el rango de la hermandad».
El gobernador por su parte ha
repetida en más de una ocasión que los infundios y falsedades que se han
esgrimido en su contra lo distraerán de la tarea fundamental de «seguir
trabajando por Chihuahua».
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