Una faceta violenta
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viernes, 15 de mayo de 2015
Leyzaola: las dos caras de una misma moneda
Por Rodrigo Borja
El mismo día en que el ex jefe policiaco Julian
Leyzaola, sufría un atentado contra su vida,
el gobernador de Chihuahua César Duarte Jáquez, aceptaba recomendación de la Comisión Nacional de
Derechos Humanos, sobre el asesinato de cuatro jóvenes por elementos al mando
de Leyzaola en 2012 en Juárez. La cadena internacional de noticias CNN,
titulaba la nota así: «sufre atentado el pacificador de Tijuana y Juárez», así
de controversial el paso del jefe policiaco por estas ciudades fronterizas.
La
información generada por el atentado recorrió el país prácticamente de
inmediato, ya que el Teniente Coronel retirado Julián Leyzaola Pérez, fue una
de las figuras que cobro notoriedad nacional e internacional, en lo más grave
de la «guerra contra el narcotráfico» emprendida por el ex presidente Felipe
Calderón.
Facetas
Leyzaola Pérez llegó Ciudad Juárez, precedido de la fama de haber
pacificado Tijuana, luego de años de
altos índices de criminalidad y a su vez del señalamiento de usar para sus
fines métodos como la tortura y la violación a los derechos humanos.
El
atentado
«Una
cámara de seguridad de un negocio captó el momento en el que fue atacado el ex
secretario de Seguridad Pública Municipal, Julián Leyzaola Pérez, el viernes
pasado por la mañana», despliega en sus informaciones el Diario de Juárez.
«En
las imágenes se observa cómo el agresor camina hacia la unidad que tripulaba el
ex jefe policiaco, la que estaba estacionada en la orilla de la calle en una
dirección de poniente a oriente y de donde bajó su esposa, quien se dirigió a
una casa de cambio a realizar una transacción monetaria.
«El agresor, que fue identificado por las autoridades como Jesús Antonio
Castañeda Álvarez, de 22 años, camina por la acera sur luego de bajar del
vehículo donde viajaba como copiloto, unos 20 metros antes de llegar a donde
estaba la camioneta de Leyzaola Pérez baja a la calle.
«Cuando se encuentra a poco más de un metro de su objetivo
saca el arma, se acerca de forma apresurada hasta la ventanilla del conductor y
realiza los disparos, enseguida sale de la escena».
La
rápida intervención de la policía y sus primeros auxilios salvaron la vida del
ex militar, quien fue trasladado al Hospital Ángeles y en ese mismo día tuvo
dos intervenciones quirúrgicas, de las cuales se repone en el Hospital Militar
de la ciudad de México a donde fue trasladado en cuanto hubo seguridad de que
el viaje no lo dañaría.
Una faceta violenta
Una faceta violenta
Sobre la controversial figura CNN abordo
con amplitud el tema: «Julián Leyzaola Pérez, el llamado superpolicía al que
se le acredita haber reducido los niveles de violencia en la ciudad de Tijuana,
fue inhabilitado por ocho años por violaciones a los derechos humanos contra
uno de sus elementos.
«La sindicatura del Ayuntamiento de
Tijuana acreditó violaciones a los derechos humanos y faltas administrativas
cometidas por Leyzaola en 2011, cuando aún era director de Seguridad Pública de
Tijuana, así como por Gustavo Huerta Martínez, ex director de Policía y
Tránsito Municipal, informó el gobierno de Tijuana en un comunicado.
«Ambos fueron inhabilitados para
ejercer cargos públicos por ocho años, sanción que aplica solo en Baja
California».En ese momento Leyzaola es secretario de Seguridad Pública en
Ciudad Juárez.
«La denuncia por la que fueron
sancionados los dos ex servidores públicos la presentó un policía en enero de
2011 en la Sindicatura Municipal, quien afirmó que Leyzaola y Huerta lo
torturaron para inculparlo de un caso de robo.
Ese mismo año la Procuraduría de
Derechos Humanos (PDH) emitió una recomendación donde pidió al Ayuntamiento que
iniciara un procedimiento contra ambos funcionarios. La PDH aplicó a la víctima
el Protocolo de Estambul y se comprobó que sí sufrió tortura física, según el
Ayuntamiento de Tijuana».
El Protocolo
de Estambul, como se le conoce al Manual para la Investigación y Documentación
Eficaz de la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes,
es un conjunto de directrices que se volvió un documento oficial de la ONU en
1999.
El protocolo,
el cual México adoptó en 2003, sirve para evaluar a personas que alegan
torturas y malos tratos, para investigar casos de tortura y para presentar sus
conclusiones ante las autoridades judiciales.
El artículo
59 de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos de Baja California
establece inhabilitaciones de hasta 10 años para los servidores que permitan,
toleren o causen bajo cualquier circunstancia tortura, aun cuando se trate de
una orden superior o se argumenten circunstancias especiales, como amenazas a
la seguridad pública.
Los dos exfuncionarios —quienes
tienen otros dos procedimientos en su contra sobre los que el Ayuntamiento no
ofreció más detalles— ya fueron notificados de su inhabilitación.
La sindicatura ahora pasó el caso a
la Consejería Jurídica del ayuntamiento, que determinará si se persigue
judicialmente a ambos funcionarios.
Leyzaola, un teniente coronel
diplomado del Estado Mayor retirado, dejó el cargo en Tijuana en marzo de 2011,
y fue nombrado como secretario de Seguridad Pública de Ciudad Juárez.
Agrega CNN: «Apenas un mes después
de asumir el cargo en Ciudad Juárez, el militar retirado fue acusado por dos
organismos dedicados a la defensa de los derechos humanos de detener a cuatro jóvenes, de los que después nada se supo.
En 2010, HRW denunció la participación directa de Leyzaola «en la tortura de personas que fueron
detenidas arbitrariamente, trasladadas hasta bases militares y sometidas a
golpizas, descargas eléctricas, amenazas de muerte y asfixia con el fin de
obtener confesiones falsas.
«En noviembre de ese año, el propio
Leyzaola reconoció en entrevista
con CNNMéxico su fama de «abusivo» y «represor», luego de que la policía de Ciudad
Juárez detuvo a 29 manifestantes por dibujar un centenar de cruces con pintura
de agua en paredes y vidrios.
«Yo nunca reprimí
una manifestación, yo evité que dañaran propiedad privada y hubo detenciones
porque me agredieron a los policías».
El día del atentado
La
CNDH emitió jueves la recomendación 12/2015, dirigida al
gobernador de Chihuahua César Duarte y al alcalde de Juárez, Enrique Serrano,
en la que urgen a reabrir la investigación del caso y sancionar a los oficiales
de policía responsables, la recomendación se dio a conocer precisamente el dio
del atentado.
La
recomendación detalla que los hechos ocurrieron el 24 de abril de 2012, cuando
los cinco agraviados fueron detenidos por los policías que los sometieron a
revisión, golpeándolos y despojándolos de sus pertenencias.
Los
implicados siguen activos, no hay carpeta de investigación ni órdenes de
aprehensión pese a que sobreviviente identificó al menos a uno, según reportó El Diario de Juárez.
«Los
seis policías implicados en la ejecución extrajudicial de cuatro civiles, entre
ellos una mujer y dos menores, siguen activos en la SSPM al no existir contra
ellos un procedimiento administrativo, informó personal de la corporación.
«Personal de la Fiscalía General del
Estado (FGE) en la Zona Norte informó que la carpeta de investigación por el
multihomicidio está «en proceso de judicialización» por lo que tampoco existen
órdenes de aprehensión contra los imputados.
«Las
víctimas de este hecho violento fueron identificadas por la FGE como: Alejandro
Martínez Rodríguez, de 16 años; Jesús Efraín Rodríguez Gabirio, de 17; José
Juan Villanueva Leal, de 18 y Verónica Cerros Olivas, de 22 años. La
joven que sobrevivió contaba con 16 años al momento del hecho.
«Todos
fallecieron a causa de un shock hipovolémico consecutivo a disparo de arma de
fuego en la nuca. En esa fecha, El Diario informó que la menor, después de ser lesionada
a balazos y considerada muerta, logró pedir auxilio para reportar el homicidio
de cuatro amigos con quienes se encontraba al momento de la agresión.
«La
CNDH pudo constatar a través de sus investigaciones que los responsables fueron
elementos policiacos municipales».
A una
semana del atentado
Mientras
tanto a ocho días del atentado, no se tienen con claridad los móviles del
intento de asesinato. Julian Leyzaola Pérez, se encuentra en el Hospital
Militar de la ciudad de México, con estrecha vigilancia y los mejores servicios
médicos.
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