De fuentes Confiables

*Una derrota cara… 

Víctor Valencia de los Santos, es quien más cara ha vendido la derrota a César Duarte Jáquez, en realidad los alcances del juarense no son tantos, su habilidad consiste en sólo ver para arriba y en ese sentido ha tenido mucha suerte con la familia Baeza, pero sobre todo en los últimos tiempos con Mario Tarango, quien juega sus últimas cartas, con Valencia, ya que el cambio generacional es inevitable y el grupo Delicias, se queda sin «gallos»… y de lo perdido lo que aparezca.

*A Valencia lo que quiera…

Ninguno de los hombres del grupo Delicias, tiene el coraje y la ambición de Valencia, de ahí que sea el último ariete, del que ha sido grupo hegemónico priista desde los años ochentas, precisamente por esos años, dos juarenses se alinean sin condiciones a la política y deseos de la corriente baecista: Víctor Valencia y Jesús Macías Delgado

*Chihuahua sigue siendo el baluarte…

En Juárez en donde los de Delicias ya no tienen la manga ancha para seguir determinando la política, es por ello que el apoyo a su único ariete en la frontera es total y en el reparto del «pastel» da la impresión, de que Valencia aún tiene una gran fuerza política. Esta impresión podría prevalecer hasta el cinco de julio próximo o en el peor de los casos para los juarenses hasta la primera mitad del sexenio próximo, si el éxito en la constitucional es del PRI. Es claro que desde hace seis años el grupo hegemónico en el Partido Acción Nacional, es de los hermanos Terrazas en la capital del estado y el PRI con un eventual triunfo de Marco Quezada, se volvería en el eje principal del baecismo en el estado, pero no se puede dejar al garete a una ciudad que concentra al 42 por ciento de los habitantes de la entidad, aun cuando supere con mucho ese porcentaje en abandono oficial.

*Salió caro…

En el reparto de candidaturas pareciera que Valencia es, dentro de su derrota, el gran ganador: su hijo Víctor Mario Valencia Carrasco, va por una regiduría; José Luis Canales de la Vega, va por la Sindicatura y Gerardo Hernández, por una diputación local. La realidad es que la fuerza política de Valencia es y será la que el baecismo, sobre todo de la mano de Mario Tarango, le quiera dar.

*Un logro para «Teto»…

Héctor Murguía Lardizábal sacó lo propio, de otra manera no se podría entender la candidatura a regidor de Rodolfo Martínez Ortega. A caballo entre José Reyes Ferriz y Héctor Murguía, se colaron Yolanda Morales y Luis Manuel Aguirre.

*Nacho Duarte también salió ganador…

El eventual primo incómodo de César Duarte, habrá que esperar a ver si triunfa: Nacho Duarte, también supo sacar su tajada se le debe abonar sin lugar a dudas a René Franco Ruiz, candidato a diputado y a la regidora Laura Domínguez.

*Olor a herencia dinástica…

Por otra parte un somero análisis de las candidaturas en donde son profusos los nombres de juniors de la política, da a las próximas elecciones un tufo desagradable de herencia dinástica, de linaje, y no precisamente del mejor. Se hace tangible aquello de la «Familia revolucionaria», lo cual puede desanimar a un buen número de militantes que piensa que con talacha se ganarán los puestos, cundo esto es cosa de patrimonio familiar, según se ve.