Por Antonio Pinedo
Con la llegada de
Manlio Fabio Beltrones a la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional del PRI,
la hortodoxia pura se instala en Insurgentes sur. Esta visión poco tiene que
ver con la «rebelión de las bases priistas» que qusiera encabezar el ex alcalde
la ciudad de Chihuahua Marco Adán
Quezada, quien con su actitud beligerante y deseperada deja en claro que las
circunstancias no lo favorecen y se encuentra fuera de la lucha por la sucesion
en la gubernatura de Chihuahua.
El momento actual
tiene sus orígenes en la sucesión anterior, en la cual el entonces gobernador
José Reyes Baeza, trató de proyectar a su paisano y primo Oscar Villalobos
Chávez a la gubernatura pero se impusieron las fuerzas del Centro, encabezadas
por Beatriz Paredes, presidenta del CEN del PRI y el duo priista más influyente
en los doce años de gobiernos federales panistas Manlio Fabio Beltrones y
Emilio Gamboa Patrón, sobre todo el apoyo del yucateco fue determinante para
resolver el caso Chihuahua a favor de César Duarte Jáquez.
En los estiras y
aflojas fue facil para José Reyez Baeza imponer a su compadre —quien por cierto
hoy pide «piso parejo»— como candidato a la presidencia municipal de
Chihuahua... los problemas empezaron cuando Reyes Baeza quería como candidato a
la alcaldía de Juárez a Víctor Valencia de los Santos y el entonces candidato
César Duarte a Enrique Serrano Escobar, el choque de trenes fue tal que logró
colarse por el hueco del impacto Héctor Murguía Lardizábal.
Vamos a conceder
que ninguno de los dos es rencoroso, al igual que Manlio Fabio Beltrones, pero
evidentemente también tienen
buena memoria.
La relación entre
el gobernador entrate y saliente desde ese momento quedó determinada por el
enfrentamiento, por los primeros años sólo fue fría, distante sin llegar a a la
ríspidez, por lo menos que se hiciera pública, que trasciende
El Aeroshow
En los últimos
meses del gobierno municipal de Marco Adán Quezada sucedió la desgracia del
llamado Aeroshow, en donde vehículo de grandes ruedas que suelen llamar «trocas
mounstro», se salió de control y se fue contra el graderío matando a ocho
personas e hiriendo a decenas.
A medida que se
acerca la sucesión en la gubernatura empiezan a aflorar las rivalidades en el
caso de César Duarte para continuar en el poder con miembros afines, de su corriente,
el «duartismo» pues, si es que éste existe y en el
caso de José Reyes Baeza, la recuperación del mismo para el «Grupo Delicias»
tan acostumbrado al usufructo del poder.
Este
desgraciado acontecimiento ha estado presente desde 2013 en las páginas de los
periódicos y en los tribunales, perfectamente administrado para sacar de la
jugada de la sucesión a Marco Adán Quezada.
La
deuda del estado
En
marzo de 2014 tuvo lugar una primera confrontación entre ambos priistas.
Durante una comparecencia ante el Congreso local, Herrera Corral acusó a la
administración de Baeza de haber dejado un boquete de 28 mil millones de pesos.
En
esta historia de desencuentros en agosto de 2014 se dan otras declaraciones del
secretario de Hacienda estatal Jaime Herrera Corral, quien aseguró que el 80
por ciento de la deuda directa de la entidad, calculada en 23 mil 873 millones
de pesos y fondeada con participaciones federales, no fue contratada en la
administración de César Duarte.
Esta
cifra contrasta con la dada a conocer por la Secretaría de Hacienda y Crédito
Público, que se acerca a los 42 mil millones de pesos.
Jaime
Herera señaló que en octubre de 2010, cuando Duarte asumió el gobierno,
Chihuahua tenía una deuda directa registrada de 12 mil 40 millones, y 3 mil 259
millones más que no habían sido registrados como pasivos, correspondientes a
deudas con proveedores, transferencias bancarias de fondos federales que se
usaron para fines distintos a los señalados, así como recursos para cadenas
productivas, entre otros, que sumaron 18 mil 873 millones.
La
situacion escaló y el 19 de agosto, Duarte Jáquez acusó a Reyes Baeza de no
reportar la deuda pública real, por dejar sin registro más de 3 mil millones de
pesos, incluidas aportaciones federales que no se ejercieron y fue necesario
regresar a la Tesorería de la Federación.
Reyes
Baeza propuso que Cristian Rodallegas, ex titular de la Secretaría de Finanzas
(que en la presente administración cambió de nombre a Secretaría de Hacienda) y
Jaime Herrera Corral se reunieran para revisar la deuda histórica. La
sugerencia fue rechazada.
Ante
los nuevos señalamientos de Herrera Corral, Baeza Terrazas, actual director
general del Fondo de la Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios
Sociales de los Trabajadores del Estado (Fovissste) en el gabinete ampliado del
presidente Enrique Peña Nieto, hizo pública una carta que envió a César Duarte.
En
la misiva, con fecha 22 de agosto, cuestiona que, cuatro años después de
concluida su gestión, se saque a flote la deuda no registrada de más de 3 mil
millones de pesos, pese a que ningún órgano fiscalizador hizo señalamientos de
manejo indebido durante su mandato.
«Lo
que no admito definitivamente es la imputación de la aplicación indebida de
recursos federales por 3 mil millones de pesos y la presunta necesidad de su
parte de contratación de deuda pública para subsanar las supuestas
irregularidades»,subrayó Baeza Terrazas en la carta, con copia a los
secretarios federales de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; Hacienda, Luis
Videgaray, y Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Jorge Carlos Ramírez
Marín.
Esta
misiva pública y el envió de la misma a tres secretarios de Estado, dejó en
claro que mínimo hubo la anuencia de alguno de ellos para hacer el movimiento
politico., presumiblemente Osorio Chong.
Tregua
mínima
En
plena campaña electoral que culminó con la votacion del 7 de junio se da un impasse al
enfrentamiento, Semanario en su edición 1180, del 31 de marzo, consigna: «Al
parecer pactan tregua los equipos políticos encabezados por el gobernador César
Duarte Jáquez y el ex gobernador José Reyes Baeza, quienes en los últimos doce
meses por lo menos se habían enfrentado abiertamente, creando una zanja entre
ellos probablemente insalvable, pero por el momento ignorada en beneficio
mutuo.
«Los primeros frutos de
la reunión de ambos bandos, se vio reflejado en menos de una semana, cuando en
una visita relámpago a la frontera, el ex presidente municipal de Chihuahua,
levantó el suficiente polvo, como para afirmar que entra en la carrera de la
sucesión gubernamental, con la confianza de que no lo perseguirán con el
fantasma de los nueve muertos en el espectáculo de los vehículos monstruo que
ensombreció el fin de su trienio en el 2013».
La tregua se dio
luego de que el sábado 14 de marzo, hubo un sorpresivo almuerzo en casa del ex
gobernador José Reyes Baeza, en su casa de la calle Zarco, en la capital del
estado. Hay una versión, no generalmente aceptada, de que desde la noche
anterior y hasta ya entrada la madrugada habían estado reunidos César Duarte y
Reyes Baeza, en compañía de Arturo Proal de la Isla y ahí fue donde se pactó la
cita para compartir los alimentos.
Reyes Baeza, actual
vocal ejecutivo de FOVISSSTE, fue el anfitrión y oficialmente se dijo que el
encuentro, respondía a un esfuerzo de unidad para enfrentar las elecciones del
próximo 7 de junio.
El gobernador Duarte
señaló que la reunión con su antecesor y diversos políticos y funcionarios,
tuvo como propósito sacar el proyecto de unidad para que el PRI obtenga el
mayor número de diputados federales en la entidad.
Se refirió en general
al conflicto entre políticos, el cual debe quedar allí, y no en la casa de la
gente, agregó que los chihuahuenses ya tienen suficientes problemas como para
endosarle desacuerdos de los políticos.
La misma edición de
semanario publicó: «Todo parece indicar que entre los primeros resultados de la
llamada ´reunión de la unidad´, está el dejar de correr la precandidatura de
Marco Adán Quezada, ex alcalde de Chihuahua, a la gubernatura en 2016. En menos de una semana.
El viernes 20 de marzo, el compadre de José Reyes Baeza, realizó una visita a
Ciudad Juárez, en donde almorzó con el recaudador de rentas, José Luis Canales
de la Vega, comió con el presidente municipal Enrique Serrano Escobar y cenó en
la ciudad de El Paso, con la familia Fuentes, en la vecina ciudad pernoctó y se
regresó el sábado a la capital estatal.
«Se espera que regrese
en los próximo días, en donde su figura es poco conocida, para presentar la
asociación civil «Sumemos Voces», en la que trabajan incansables su esposa
Lucila Chavira y la diputada Teporaca Romero, hija del ex secretario general de Gobierno Raymundo Romero
Maldonado».
Osorio Chong con
Baeza
Se filtra a
columnas polÍticas de la capital del estado, presumiblemente por parte de los
baecistas, que Marco Adán Quezada se abre de capa para ir por la candidatura
del PRI a la gubernatura de Chihuahua en junio del próximo año, con la venia
del secretario de Gobernacion, Miguel Ángel Osorio Chong.
Luego de la fuga de
Joaquín Guzmán Loera El Chapo, y el subsecuente socavamiento del poder del
secretario de Gobernación, se precipitaron las cosas y Marco Adán Quezada y el
jefe del grupo José Reyes Baeza, empezaron a actuar de manera beligerante,
Marco Adán cita a conferencia de prensa y acusa al gobernador César Duarte, de
intentar descarrilar su proyecto político, administrando los hechos derivados
del Aeroshow e intentando inhabilitarlo
por cinco años para que pueda buscar un puesto de elección popular, en esta
vorágine de acontecimientos se planta con cientos de simpatizantes priistas
frente al Congreso del estado, para presionar y evitar que se dictamine su
inhabilitacion, previo a ese viernes 14 de agosto, se había amparado contra la
posibilidad de ser inhabilitado.
Es abierto el
enfrentamiento entre reyistas y duartistas, este pleito practicamente saca de la jugada de la sucesión a los dos
grupos, ya que la ortodoxia de Manlio Fabio Beltrones, y su declración de la
sana cercanía con el presidente de la república, manda el mensaje de un
candidato de unidad y no requiere un gran análisis el demostrar que el
enfrentamiento entre Duarte y Reyes, saca de la contienda a sus afines.
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