Tras los pasos…. «Manuel Quevedo Reyes»

1- Hijo del general Alonso Quevedo Moreno, nativo de Casas Grandes, como toda la parentela de éste y de Rodrigo M. Quevedo, el mayor y más conocido de una larga serie de generales revolucionarios, que por cierto cambiaban de chaqueta seguido, como este Rodrigo que, luego de reconocer a Victoriano Huerta y tras su caída con la toma de Zacatecas se unió al villismo, cuando éste estaba en su etapa guerrillera y antes de la rendición de Pancho Villa, ya estaba en las filas obregonistas, o sea que mucha convicción no había, de hecho fue el primer gobernador de Chihuahua legalmente narcotraficante, me refiero a documentado, sobre todo en el Departamento de Estado de los EU, su labor como cabeza del narcotráfico en Chihuahua. De esa Cepa viene el ex alcalde Quevedo.

2.- Quien hace ocho años, cuando aún gobernaba la ciudad Gustavo Elizondo Aguilar, visitó los terrenos de El Barreal, luego de unas intensas llovidas, lo acompañaban dos a tres personas, entre ellos un par de ingenieros de su confianza, a quienes pidió un estudio, sobre el uso de esos extensos terrenos, que en ese verano del año 2000, estaban anegados en ambos lados de la carretera «Libramiento Aeropuerto» o Boulevard Independencia. El resultado del análisis fue que con 25 metros de profundidad de lodos, arrojados allí por el limo de por lo menos dos mil años de lluvias en la región, los terrenos no eran aptos para construcción. Hace ocho años, Quevedo Reyes sabía que en su enorme predio no se podía construir nada…

3.-Sin embargo siguió con su proyecto de vender, lo que había sido una laguna de vertiente interior y que sólo en época de grandes lluvias, se volvía en la conocida «Laguna de Patos». No le importó que era un vaso de tres a 2.5 metros de profundidad, que cuando era llenado con los escurrimientos de múltiples arroyos que vienen de cientos de kilómetros atrás, se convirtiera en un recipiente sin salida para el agua, cuyos lodos por otra parte se expandían, y lo hacían un suelo impermeable, sólo un par de años de sequía regresaban la aridez al terreno… no le importó a Quevedo Reyes, continuó con su proyecto que según cálculos del Diario de Juárez, le dejaron ganancias de 20 millones de dólares.

4.- El ahijado de Bernardo Aguirre, lo menciono, porque ese fue el mérito para llegar a la alcaldía, no demostró cariño por Juárez, pudo más su codicia; ya la había demostrado en la alcaldía, en donde no hubo un solo terreno municipal detectado, sin ser denunciado. Para su apropiación, por la familia Quevedo, hasta un camellón de tres o cuatro metros de ancho frente a Tránsito, que cualquiera pensaría es un espacio público invadido, fue denunciado en su trienio por Jesús Quevedo, su primo. ¿Tienen culpa los que autorizaron el uso de suelo? si por supuesto, ¿tienen culpa los constructores? si por supuesto, pero la culpa original, es la ambición de Quevedo que sabía que esos terrenos no eran propios para ninguna construcción… ahí hay vileza. (Rodrigo Borja).s