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jueves, 30 de julio de 2015
Amenaza con descarrilar la sucesión de Duarte
Por Antonio Pinedo
A 90
días de que inicie formalmente el proceso electoral por parte del Instituto
Nacional Electoral y a cinco meses de que formalmente los partidos tengan
candidatos a la gubernatura, en Chihuahua la contienda electoral se desborda y
escapa de las manos del gobernador César Duarte, quien, según la tradición
priista es quien debería conducir en calma el proceso de sucesión… de su propia
sucesión.
Estamos
ante un proceso interno atípico, en las últimas décadas, de Manuel Bernardo
Aguirre para acá, los procesos internos del Partido Revolucionario
Institucional, habían sido reñidos a intramuros, pero se salía con un candidato
de unidad, siempre con la bendición de las fuerzas políticas en el Centro, con
el visto bueno del presidente de la república en turno en el caso de los
procesos anteriores al año 2000 y con el visto bueno de la «nomenklatura» priista en los tiempos de los gobiernos federales panistas.
La
decisión del Centro fue importante hasta en el triunfo de Francisco Barrio
Terrazas, candidato panista cuyo triunfo buscó y consiguió el presidente Carlos
Salinas de Gortari, a quien la elección de Jesús Macías no le reportaba ningún
beneficio o ganancia política y en cambio la elección y reconocimiento de la
victoria del candidato del Partido Acción Nacional, Francisco Barrio, lo
proyectaba al mundo como un demócrata, como un presidente que enmendaba el
atropello de 1986 y estaba abierto a la alternancia.
Breve historia de la sucesión
El
propio Manuel Bernardo, conocedor de las reglas de la política nacional, jamás
opuso un contendiente frente a Óscar Ornelas Kuchle, a quien el presidente José
López Portillo, llamaba «Ornelotas» y a quien proyectó con mucha anticipación a
la gubernatura.
Nadie se
opuso tampoco cuando desde el Centro, venía con la bendición del presidente
Miguel de la Madrid, Fernando Baeza
Meléndez, a quien incluso le quitaron del camino a Francisco Barrio en un
proceso electoral que pasó a la historia.
La
sucesión de Baeza Meléndez ya fue comentada, el presidente de la república
Carlos Salinas de Gortari, ni el nombre de Jesús Macías se sabía, le llegó a llamar Jesús Mendoza, pero tenía
presente el nombre de quien quería en la gubernatura y aún es recordado que
Barrio Terrazas se ganó la fama del gobernador más salinista del país.
En 1998
no se le debía nada al PAN y el dominio de Artemio Iglesias Miramontes de las
estructuras priistas, parecían dar claridad a la sucesión. «El filósofo de Rubio» se jactaba «como me la
pinten brinco», hombre de partido tenía una amplia experiencia en procesos
electorales y era bien visto en el PRI nacional, pero el presidente Ernesto
Zedillo no veía bien a los priistas y el ex gobernador Fernando Baeza, con el
Grupo Atlacomulco atrás, toma de la mano a Patricio Martínez y se lo «vende» a
Ernesto Zedillo, quien después se arrepintió de haberlo hecho gobernador, según
sus propias palabras.
Sin árbitro
en Los Pinos, sin el «fiel de la balanza» que era un presidente priista, como
lo definió José López Portillo. Fernando Baeza vuelve a demostrar su
conocimiento de la política nacional al realizar la misma operación que con
Martínez García, ahora con su sobrino José Reyes Baeza, en el camino se quedaba
el candidato soñado por el gobernador: Víctor Emilio Anchondo Paredes.
La
sucesión de José Reyes Baeza, es parecida a la anterior, se sigue sin tener el
árbitro que los priistas tenían en Los Pinos. Baeza Terrazas, le sirve la mesa
a Oscar Villalobos, también del Grupo Delicias, también miembro de la familia.
Vuelve a imponerse la «nomenklatura» priista ahora encabezada por la presidente
del PRI, Beatriz Paredes Rangel y por los influentes Manlio Fabio Beltrones y
Emilio Gamboa Patrón.
El
Centro se vuelve a imponer con la candidatura de César Duarte Jáquez, quien
ahora, sin dominio sobre su propia sucesión, realiza movimientos políticos en
los que las señales se cruzan y trata de proyectar control sobre la misma y
olvida las lecciones de política que impartió Manuel Bernardo Aguirre.
Olvida los usos y costumbres
El
gobernador César Duarte, pretendiendo olvidar las reglas que rigen a este
proceso desde hace décadas, jugó con un amplio espectro de posibilidades para
sucederlo: Enrique Serrano Escobar, Javier Garfio Pacheco y Marcelo González
Tachiquín, en una primera etapa, luego subió también a la contienda al
presidente del Supremo Tribunal de Justicia José Miguel Salcido Romero.
Teniendo
a cuatro en su «terna», da signos de haber tomado la decisión a favor de
Enrique Serrano Escobar y aquí sube a un
quinto contendiente al nombrar coordinador de Políticas Públicas, al ex alcalde
de Ciudad Juárez Héctor Murguía Lardizábal, no obstante en la percepción de los
observadores políticos existe la certeza de que su candidato es sin lugar a
dudas el alcalde juarense, no obstante esto último aún se da el lujo de seguir
«placeando» a sus cinco precandidatos, alentándolos e ignorando a quienes por
sus actuales posiciones o pertenencia de grupo como es el caso de Marco Adán
Quezada y en el primero de los casos las
senadoras Lilia Merodio y Graciela Ortiz, están en posibilidades de buscar la
candidatura del PRI a la gubernatura, como ya lo han manifestado los tres.
La
sucesión hoy se da en un reclamo fuerte de «suelo parejo» por parte del
exalcalde de Chihuahua Quezada Martínez y de la senadora Merodio Reza. Graciela
Ortiz, dice estar en estado zen y esperando los tiempos… mientras tanto el proceso
amenaza con desbordarse y evidentemente no está en manos del gobernador César
Duarte, como tampoco lo estuvo en manos de Fernando Baeza en 1992.
De Fuentes Confiables
*Javier Corral en difícil trance
El dominio de Gustavo Madero de las estructuras del
Partido Acción Nacional, es tan completo, que un triunfo de Javier Corral,
senador chihuahuense que disputa la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional
del PAN a Ricardo Anaya, delfín de Madero Muñoz, se antoja como un triunfo
imposible. Corral Jurado le apuesta a las redes sociales y a que los panistas
quieren un regreso a los orígenes.
*Javier Corral en difícil trance II
En lo que respecta a las redes sociales, éstas revelan
una mayor penetración del diputado queretano Ricardo Anaya, quien llega a tener
más de 190 mil «me gusta» en algunas de sus publicaciones en su muro de Facebook, mientras
que el juarense apenas alcanza en sus mejores publicaciones siete mil. Los
panistas que quieren regresar a los orígenes son los de la generación anterior;
los panistas de hoy quieren una mansión
y fortuna como la que logró amasar Alejandra Sota, una de las favoritas en Los
Pinos en el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa.
*Una oportunidad para Corral
Muchos ven en el debate que se planea entre los dos
contendientes a la dirigencia nacional del PAN, una buena oportunidad para que
Javier Corral, con su reconocida capacidad oratoria, pueda sacarle algunos puntos
a Ricardo Anaya, pero quienes han visto en el papel de tribuno a Anaya, no se
hacen muchas ilusiones, de cualquier manera será un duelo digno de verse.
*La sucesión priista
También en el Partido Revolucionario Institucional, en el
mes de agosto habrá relevo de la dirigencia nacional. Acá son otras las formas
y se espera que en una asamblea de consejeros nacionales, sea ungido quien
escoja el presidente Enrique Peña Nieto. En esta línea de pensamiento hay que
buscar entre el círculo del presidente a personajes con posibilidades, por
ejemplo Ramírez Marín, Alfonso Navarrete Prida, Aurelio Nuño, Enrique Martínez…
Manlio Fabio Beltrones, es muy mencionado, pero no está en ese círculo íntimo.
*Versión muy repetida
Hay una versión que se repite mucho entre los corrillos
políticos de la capital del estado, se habla con insistencia y se repercute en
columnas políticas, que el gobernador César Duarte irá al gabinete de Peña
Nieto, se habla con insistencia de la
Sagarpa, que teóricamente dejaría Enrique Martínez, para ir a la dirigencia
nacional del PRI. Hay versiones más audaces que hablan de que el chihuahuense
iría a Gobernación o la presidencia del PRI.
Crónica
Valle de Juárez,
pesadilla de los locos
que no tienen a dónde irse
- Guadalupe y
Práxedis casi están despoblados por la amenazante presencia del crimen
organizado
-En 1849 los
fundaron mexicanos que vivían en Texas y Nuevo México, pero que prefirieron venirse
a estar en suelo gringo
-Con el Tratado
Guadalupe Hidalgo de 1848 perdimos la mitad de nuestro territorio desde el Golfo hasta la California
-De allá vinieron
y hacia allá se están yendo, porque ya se perdió la tranquilidad en el Valle de
Juárez
-Con Clinton
intentaron recuperar sus viejas herencias, pero fracasaron por colusión entre
autoridades de México y EE UU
-De 1902 hasta
1911 San Ignacio era escondite de Anti reeleccionistas y de Magonistas. Con
ellos venía Práxedis Gilberto Guerrero
-Por eso los
viejos del pueblo le pidieron en 1933 al gobernador Rodrigo Quevedo que este
municipio llevara ese nombre
Por Jesús
González Raizola*
Don Alfonso Taracena en el
segundo de sus seis tomos de Verdadera Historia de la Revolución Mexicana, escribe
que el 24 de enero de 1910 el cónsul mexicano en El Paso se quejó ante el comandante del Fort Bliss de
que algunos revoltosos bien conocidos, el último domingo en la tarde,
cruzaron el Río Bravo y tomaron
posesión de la pequeña población de San Ignacio,
retornando después a la margen americana con el botín que recogieron en aquel
lugar llamado San Ignacio.
A página seguida, agrega
Taracena:
«Desde muchos
años antes de 1910 los cónsules mexicanos informaban al secretario de
Relaciones de Porfirio Díaz, que era intensísima la propaganda Revolucionaria
en uno y otro lado de la frontera entre México y los Estados Unidos».
Reproduce Taracena, como muestra
de lo antes dicho, algunos de los informes de los cónsules mexicanos a su
cancillería:
«… el 20 de junio de 1908 se
descubre una conspiración de veinte
Magonistas en Casas Grandes que se levantaron en armas el 25…
«… ese mismo día otro grupo de
Magonistas bien montados y armados entran a Viesca, Coahuila, cometen tropelías
y se llevan veinte mil pesos de un banco…
«…el 26, cuarenta hombres atacan
Las Vacas, hoy Acuña frente del Río y al ser rechazados mueren once rebeldes y
nueve soldados federales…
«…el 30 de junio de 1908 atacan
Palomas, al norte de Chihuahua, en número de once revoltosos de los que nueve
son aniquilados…»
Pero en el caso de los de San
Ignacio, mentía el cónsul porque en la
realidad los habitantes de ese pueblo eran amigos, casi correligionarios de los
Magonistas , quienes venían en el tren del Texas Pacific o bien de San Antonio
o de El Paso, se bajaban en la estación de Tornillo, frente a San Ignacio,
lugar éste, en aquel tiempo, muy aislado, entre bosquecillos y matorrales de
sabinos y mezquites, por lo que lo preferían los Magonistas para descansar y
estar tranquilos, por lo menos unos días, a salvo de la persecución que sobre
ellos desataba sin piedad el gobernador Enrique Creel y Porfirio Díaz, desde
Chihuahua y desde México, respectivamente.
El que escribe nací en suelo de Práxedis
G. Guerrero. En la parcela de mi padre, barriada de Rinconada de Gallegos,
ejido de Porvenir, el 15 de octubre de 1937.
En la escuelita de tres grados,
en la Rinconada de Porvenir, me dio clases aquel muy estimado profesor Antonio Luna Soto.
Luego, en Congregación Esperanza, cursé de cuarto a sexto, con los muy
competentes profesores Teódulo Montana Viesca, de nuevo Luna Soto y don Alfredo
Chávez Luna que además de atender el sexto era el director de la escuela «Daniel Delgadillo».
En vacaciones de
secundaria o de los tres años que estudié en la escuela de Agronomía en Juárez, me hicieron el favor
de ocuparme, como escribiente, en la Presidencia Municipal de Práxedis, primero
el alcalde don Andrés Fierro y luego el doctor Oscar Hurtado Padilla. Y cuando
lo requerían, también me daban chambitas don Ignacio Cedillos, que era el Juez
Menor, don Lorenzo Reyes Aragón, que era el sub agente del Ministerio Público,
don Pedrito Gardea Téllez, que era el tesorero municipal, don Manuel Miranda,
delegado de Tránsito del estado, hasta el profesor Abraham Salazar, director de
la escuela «Lucas Balderas» iba en ocasiones a que le pasara a máquina textos
de sus informes y documentos escolares.
Ellos, sobre todo
los funcionarios públicos citados, eran personas de bastante edad, rebasaban
los setenta pero bien conservados, y cuando yo daba por concluida mi tarea
matutina o vespertina, me agradaba muchísimo acercarme a oírlos platicar, sobre
sus trabajos, sobre política, sobre sus memorias, sobre sus antepasados, pues
todos ellos eran descendientes directos de los fundadores del pueblo, venidos
de Texas y Nuevo México porque quisieron seguir siendo mexicanos cuando
aquellas tierras pasaron a ser gringas.
Por lo que les
oía, incluso ellos eran jóvenes o tal vez adultos tempraneros, cuando los
Magonistas, cincuenta años atrás, venían a refugiarse a San Ignacio.
Sí, ellos eran, en realidad, parte de las
familias Cedillo, Beanez, Pérez, Carreón, Candelaria, Sandoval, Barraza,
Miranda, Luna, Martínez, Vega, y otras muchas, cuyos apellidos aún existen en
muchos lugares de Texas pero sobre todo de Nuevo México donde, según les
oí en sus pláticas, conservaban
numerosos parientes, asentados, de alguna manera, en lo que fueron sus
pertenencias antes del Tratado de 1846. La mayoría de éstos personajes que
atraían mi atención, sabían inglés, por costumbre familiar, como don Pedrito
Gardea, viejecito bonito, atento, amable que cuando llegaba, me saludaba: «Manuelito,
good morning por la mañana». O bien,
emitía el «I am sorry, perdón my», cuando en algo se equivocaba.
En la oficina del presidente había un cuadro
al óleo con la efigie de Práxedis G. Guerrero y la leyenda: «Muerto en Janos el
30 de diciembre de 1910»
Una tarde me
atreví a preguntarles:
–¿Ustedes lo
conocieron?
Y todos
contestaron con la afirmativa, dándome confianza para hacerles otra pregunta:
–¿Cómo y dónde lo
conocieron?
Se adelantó don
Nacho Cedillos, el juez menor, y dijo.
Me dijo:
–Lo conocimos
aquí, Manuelito. Aquí cuando venían los
precursores de la Revolución y cuando venían los Magonistas. Casi estoy seguro
que Práxedis vino, una o dos veces, en 1908. Ya no recuerdo si un poco antes, o
un poco después. Eran los tiempos en que ellos venían aquí, porque aquí tenían nuestra
amistad y ellos nunca nos ofendieron en lo mínimo.
Habló don Pedrito
Gardea y mirándome con ojos amables me aclaró:
–Práxedis era un muchacho muy joven. Simpático. Muy platicador. Muy educado, Muy decente. Y se notaba que los
demás lo respetaban. Le manifestaban mucho cariño. Mucho afecto. Igual que a
todos nosotros.
– ¿Y los
otros, quiénes eran?
–Mire Manuelito:
de alguna manera supimos que venía Juan Sarabia, Prisciliano Silva, Santiago
Holguín, Luis Mata, Chava Medrano, Enrique Flores Magón, y otros, ya usted a
saber quiénes serían. Todos muy ordenados.
Muy respetuosos. Traían sus lonches. Sus bebidas. Y las compartían hasta
donde les alcanzaba. Una de las últimas visitas venían los muchachos de aspecto gringo que en
un papel anotaron sus nombres. Parece que decían Jack London uno de ellos. Y
Richard Francis el otro. Según esto, éstos dos muchachos eran periodistas», me
dijo solemne como siempre, don Andrés C. Fierro, que era Presidente Municipal, un señor alto y
delgado, de seguro unos ochenta años de edad. Andaba siempre muy derechito.
Caminaba muy aprisa. Su voz era muy fuerte. Ya era el agricultor que siempre
llevaba al despepitador la primera paca de la cosecha de algodón cada año.
–¿Y quién le puso
el nombre de Práxedis al pueblo y al municipio?
–Nosotros–, contestan don Dagoberto (don Beto) Cedillos y
casi en dúo don Octavio Beanes. Y explicaron:
–Un buen día vino
Pancho Rodríguez que era diputado por Juárez, y nos dijo que estaban cambiando
los nombres de los pueblos. Que San Ignacio se iba a llamar General Salvador
Alvarado en lo sucesivo. Que ya era un hecho, pero todos en el pueblo le
dijimos que no lo aceptaríamos. Que sin quererlo, que sin discutirlo, nosotros
pediríamos que se llamara Práxedis G. Guerrero. Y nos molestó el desafío del
diputado que dijo que palo dado ni Dios lo quita. Pues verás que si lo
quitamos. Y nos organizamos como pudimos, y unos diez o doce nos fuimos a
Juárez y agarramos el tren para Chihuahua, con el fin de manifestarle nuestra
inconformidad al gobernador Rodrigo Quevedo.
Yo muy atrevido,
conchudito, hasta irrespetuoso le dije:
¿Y qué pasó. A lo
mejor el gobernador Quevedo ni los recibió?
Responde don Práxedis
Acosta, el dirigente campesino local:
–Si. Si nos
recibió en el Palacio de Gobierno. Y al grano le dijimos que si él no tenía
algún inconveniente, queríamos que nuestro pueblo y nuestro municipio se llamara Práxedis
Gilberto Guerrero.
–¿Cómo voy a
tener inconveniente si Práxedis y yo fuimos compañeros de armas. Anduvimos
juntos por Casas Grandes, por Palomas, por Ascensión. Fuimos Magonistas los
dos. ¡Cómo voy a tener inconveniente, hombre!
–Así nos
contestó. Y platicó algunas de sus andanzas como Magonistas al lado de Práxedis,
junto con su hermano Silvestre Quevedo, con Enrique Flores Magón. Y luego
recordó algo de cuando anduvo en las diferentes etapas de la Revolución
Mexicana. Y no sólo ordenó poner el nombre de Práxedis a San Ignacio sino que
también ofreció que iba a ordenar localizar los restos de Práxedis en Janos
para llevarlos a Chihuahua. Nos invitó a comer, con unos tragos de sotol, y
mandó a una persona a comprarnos los pasajes del tren que pasaba a las once de
la noche hacia Juárez.
El 30 de
diciembre de 1933, en el 23 aniversario del fallecimiento de Práxedis G.
Guerrero, la 35 Legislatura de Chihuahua aprobó y decretó la propuesta de los
habitantes de San Ignacio secundada por el gobernador Quevedo, y desde esa
fecha es el nombre oficial de este municipio del Valle de Juárez, ahora, en
2015, al igual que el de Guadalupe, su vecino inmediato, padece el acoso del
crimen organizado al que nadie le pone fin de verdad, no solamente con
declaraciones periodísticas.
Los diputados que
aprobaron el nombre de Práxedis para San Ignacio fueron los siguientes:
José Chacón
Vázquez, por Chihuahua; Carlos Ávila, por Parral; Juan Arias, por
Cusihuiriachi; Francisco G. Rodríguez, por Juárez; Juan J. Natividad, por Camargo; Juan N.
Fernández, por Jiménez; Francisco V. Antillón, por Guerrero; Eugenio Prado, por
Aldama; Gustavo Baca Parra, por Casas Grandes; Cipriano Yáñez, por Batopilas;
Miguel Chávez Palma, por Guadalupe y Calvo; y Ángel Salido, por Uruachi.
Concluyo este
texto, con un terrible eco zumbando mis oídos: «Sólo los locos estamos quedando
en el Valle de Juárez, porque no tenemos para dónde irnos».
Chihuahua, julio
del 2015.
*Premio Nacional
de Periodismo 1973
La intermodal
Finalmente el Cabildo de Ciudad Juárez, aprobó el desarrollo de más de un millón de metros cuadrados para el desarrollo de un condominio industrial en San Jerónimo, un proyecto que trasciende nuestras fronteras y se inserta en las rutas del comercio mundial.
Los planes en esa zona de la ciudad son el motivo por el cual la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, concibió el programa llamado de convivencia ferroviaria, que consiste en la construcción de cinco pasos a desnivel en la zona centro de la ciudad, para que cuando pase el ferrocarril, tenga el paso libre las 24 horas del día y el estrangulamiento del tráfico de personas y mercancías entre el oriente y poniente de la ciudad no sea el grave problema que aún es y se eviten en lo posible los constantes accidentes que las vías en pleno centro de la ciudad ocasionan.
La Corporación Inmobiliaria San Jerónimo S. de R.L. de C.V., proyecta un parque industrial, un recinto fiscal y un área de maniobras ferroviarias, lo que en el mediano plazo, siendo optimistas unos cinco años, podría provocar que el tránsito del ferrocarril por el centro de la ciudad cese y se desvié hacía San Jerónimo.
La obra trasciende fronteras y tiene como objetivo último el que las mercancías de Oriente, particularmente las de China, se lleven menos tiempo en llegar al gran mercado de los Estados Unidos. Nuestra ciudad por su posición geográfica es muy atractiva para un proyecto que busca alcanzar en el menor tiempo posible y a los precios más bajos, los grandes mercados concentrados en las costa este y oeste de los EE UU.
En el lado del estado de Nuevo México, ya están listos desde hace meses con una intermodal de dimensiones continentales y se espera lo mismo del lado mexicano.
Entre los beneficios que esta ruta comercial conlleva, es el abaratamiento de mercancías por bajar los costos de transporte y estiba, amén de que los barcos actualmente en el puerto de San Diego en California, tienen que hacer una espera de meses para poder descargar las mercancías.
Al liberarse del tráfico ferroviario, las actuales vías, podrían ser utilizadas para un tren ligero que aminorara los tiempos de transporte hasta la Ciudad del Conocimiento, que quedan a sólo unos minutos de las vías del ferrocarril, por supuesto si se construye una carretera de un máximo de seis kilómetros.
Son buenas noticias para Juárez, de alguna manera ya esperadas.
editorial 1195
viernes, 17 de julio de 2015
La segunda fuga del Chapo:Burla y suspicacias en el mundo
Por Antonio Pinedo
Pasmo, burlas y múltiples
suspicacias despertó la segunda fuga de Joaquín Guzmán Loera «El Chapo», del
penal más seguro de México, hay indicios de que el plan se empezó a fraguar,
casi en el momento en que el presidente de la república Enrique Peña Nieto, le
decía al periodista León Krause, que una segunda fuga «sería imperdonable».
Para dejar en claro que se le
vigilaba estrechamente el presidente le dijo al periodista de Televisa, que él
llamaba diariamente al titular de Gobernación, todos
los días y le decía «lo tienes bien vigilado, estás seguro», los dichos del
presidente se dieron durante la euforia de la captura de «El Chapo» en febrero
de 2014.
Un año cinco meses después el
presidente se tiene que tragar sus palabras, ante la espectacular, peliculezca
e increíble fuga del capo. Fuga que en el mundo es vista como una burla al
Estado mexicano y una demostración de
ingobernabilidad y rampante corrupción.
Se alzan voces ya para pedir la
destitución de Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación y se recuerdan
las palabras del entonces procurador general de la República, Jesús Murillo
Karam, quien dijo que los Estados Unidos tendrían que esperar 200 o 300 años,
para que les fuera entregado «El Chapo», ya que había una petición de
extradición.
Teóricamente escapó a través de un
sofisticado túnel, construido desde una casa que está a la vista tanto del penal del Altiplano —antes
Almoloya— y una unidad militar que sólo queda a 720 metros de llano, totalmente
a la vista. De esa casa en construcción supuestamente se extrajeron en los
últimos 500 días, un camión de volteo diario con escombro y nadie se dio cuenta
o sospechó algo irregular.
La fuga se dio mientras el
presidente volaba hacia Francia en una visita de Estado, en la que
increíblemente lo acompañaban el secretario de Gobernación y los secretarios de
Defensa y Marina. Osorio Chong, dejó inmediatamente la numerosa comitiva
presidencial y regresó al país a encabezar la recaptura del jefe del cártel de
Sinaloa.
Hasta el momento han sido cesados el
jefe de Inteligencia de la Policía Federal Ramón Pequeño García; Ignacio
Hernández Mora, ex titular del Órgano de Prevención y Readaptación Social;
Celina Oseguera Parra ex coordinador de los Centros federales de Readaptación
Social y el director del penal Valentín
Cárdenas Lerma.
Una
fuga de 50 millones de dólares
En una entrevista para la cadena
estadounidense Univisión Jhon Jairo Velázquez, ex brazo derecho de Pablo Escobar,
habló de la fuga y la tasó en 50 millones de dólares y habló de la reactivación
que habrá de esperarse de la CIA y la DEA para la recaptura.
Las repercusiones en el mundo son
del tono de la nota publicada por The New York Times, el martes 14 en su
primera plana, en ella afirma: El Chapo «se ha convertido en un símbolo de la
incapacidad del presidente de afrontar los males entrañables de corrupción,
impunidad y huecos en la ley».
El mismo diario habla del rechazo
del gobierno mexicano a la ayuda ofrecida por los Estados Unidos, NYT afirma: «horas después de que el capo más
famoso del mundo escapara el fin de semana de la prisión de más alta seguridad
en México, Estados Unidos ofreció todo lo que tiene para ayudar a recaptúralo,
alguaciles, drones e incluso equipo de tarea especial».
El País, de España dedica su
editorial a lo que es una «tremenda humillación para México» y supone también
la exposición de «las fallas estructurales del mismo Estado mexicano».
Muchas fueron las señales que
anunciaban la fuga, entre otras el haberle permitido estar en una celda del
primer piso y la misma en 18 meses, ¿Cuando los protocolos de cárceles de
máxima seguridad marca que cada tres meses tiene que haber rotación de reos en
las celdas.
La periodista Anabel Hernández,
comentó sobre estas inconsistencias en la entrevista de CNN con Carmen
Aristegui, por ejemplo cómo es que reos aislados y sin contacto se pueden poner
de acuerdo para una huelga de hambre, como la que encabezó «El Chapo», en el
Altiplano. La conclusión de la investigadora es que el capo jamás fue
neutralizado.
Edgardo Buscaglia fue claro al
mencionar en el mismo espacio de CNN que «si a este hombre realmente lo someten
a un procedimiento judicial en un país de gobernabilidad promedio, la mitad de
la clase política estaría siendo procesada, como lo fue en Italia o en
Colombia, a través de las conexiones que la organización criminal que él lidera
han venido tejiendo con senadores, diputados, gobernadores, etcétera».
Las críticas han venido incluso de
quienes fueron prohombres del sistema, como es el caso del ex gobernador de
Morelos Jorge Carrillo Olea, fundador del CISEN, quien criticó abiertamente el
«desplante» de viajar a Francia junto con el secretario de Gobernación, de
Defensa y de Marina.
«Esta es otra expresión de su
autoritarismo. ¿Cómo se lleva al mismo tiempo al secretario de Gobernación y al
de Defensa. Es un viaje que tiene implicaciones de una especie de ´reyecito´»,
dijo Carrillo Olea.
Agregó que había crisis de liderazgo
personal de Peña Nieto y que lo sucedido es «la evidencia de un gobierno
absolutamente ineficiente porque la forma de ejercer tan verticalmente el poder
ha destruido el aparato».
El último minuto del Chapo en prisión
Una revisión minuciosa del video
dado a conocer por el gobierno para explicar cómo fue la fuga de «El Chapo»,
habla de «puntos ciegos» y tanto Monte Alejandro Rubido como Osorio Chong, se
mantienen repitiendo que hay «puntos ciegos» en apego a la recomendación de los
organismos de Derechos Humanos, que estos puntos ciegos son la regadera y el
sanitario, lo cual es falso y se comprueba con un ligero análisis del video
dado a conocer a la opinión pública, para fundamentar su teoría del escape.
Es claro que cuando el Chapo ocupa
el retrete, siempre está a la vista de las cámaras la cabeza y también cuando
se mete a la regadera, la cámara capta de medio cuerpo para arriba, por lo cual
nunca hay «puntos ciegos» y en los últimos minutos de su estancia en el penal,
se ve claramente cómo revisa tres veces la zona de la regadera, se agacha y
mueve algo, luego se cambia las sandalias por zapatos tipo mocasín y claramente
se ve cuando se baja por la regadera, con gran rapidez, no se agacha, simplemente
se va.
El comisionado nacional de
Seguridad Monte Alejandro Rubido reveló y explicó las imágenes, además
del protocolo que se activó tras detectarse que había escapado y del
despliegue federal y estatal realizado para capturarlo, situación que
hasta ahora no se ha logrado.
Dijo que la Procuraduría General de la República (PGR) investiga si
los funcionarios involucrados siguieron los protocolos establecidos y si
hubo complicidad por acción u omisión. Reiteró que todos los que resulten
involucrados serán castigados.
Luego de su huida de Puente Grande,
la prisión de máxima seguridad de Jalisco, se habló insistentemente del «capo
del sexenio» incluso en los encabezados
de prensa, los eventos recientes nos hablan claramente de un capo
transexenal.
De fuentes confiables
*Rápido pasan los días
El paso del tiempo parece acelerarse para los políticos a medida que se acerca el
momento de la definición de candidatos para la sucesión en la gubernatura de
Chihuahua. Por el lado del PAN, las
cosas se ven más o menos así: hasta el momento hay un claro precandidato, que
es el diputado electo Juan Blanco y se habla insistentemente de que el senador
Javier Corral, buscaría una segunda oportunidad, recordemos que ya fue
candidato de la coalición PAN-PRD en 2004, cuando fue vencido por José Reyes
Baeza, también está la circunstancia de que se menciona a Gustavo Madero, como
precandidato, sobre todo en las ciudades de Chihuahua y Juárez, en el Distrito
Federal, lo ven peleando por la candidatura del PAN a la presidencia de la
república.
*Lucha cruenta en el PRI
Lo que se resolverá en el PAN en una convención estatal
en el mes de noviembre o diciembre, en
el PRI, se está convirtiendo en una desordenada lucha en la que no hay árbitro
y evidentemente escapa del control del gobernador César Duarte. Es tal el
ambiente de confrontación que se está creando que importantes personajes del
priismo nacional, están pidiendo la intervención del CEN del PRI, para evitar
el desbordamiento.
*La confrontación real
Es evidente que el «reyismo», heredero directo del «baecismo», se está poniendo a las patadas con quien
debería tener el mayor interés porque las pasiones no se desborden y se realice
una transición tranquila: el gobernador César Duarte. Sin embargo, todo apunta
a que la confrontación es precisamente entre el gobernador y su candidato el
alcalde de Ciudad Juárez, Enrique Serrano Escobar y el ex gobernador José Reyes
Baeza y su candidato el ex alcalde de Chihuahua Marco Adán Quezada.
*Chela en estado zen
Mientras la confrontación
política se está dando entre el actual gobernador y el inmediato anterior, la
senadora Graciela Ortiz González, se muestra activa pero cauta, como repite,
esperando los tiempos que supone serán hasta el próximo año, en el mes de enero
cuando se tome la decisión, sobre la candidatura del PRI a la gubernatura de
Chihuahua. Se dice interesada en buscarla pero sin obsesiones y la tranquilidad
que demuestra viene, según dicen los que saben de una conversación que sostuvo
allá en la Ciudad de los Palacios, con la persona adecuada para tener este tipo
de conversaciones, que si nos atenemos a los usos y costumbres del PRI, es
fácil deducir que la plática fue con el presidente Enrique Peña Nieto.
Crónica
Luis Salayandía, Jacobo Zabludovsky
y el premio Francisco Zarco
*Fue gratísima la
sorpresa de media noche en una modesta cantinita de Parral
*Luis me despertó
por teléfono y me dijo «levántese para echarnos unos tragos»
*Oyó que en 24
Horas dijo Jacobo que obtuve un premio
nacional de periodismo
Jesús González
Raizola*
A partir de la media noche de aquel día de finales
de septiembre de 1973, los
nombres de Luis Salayandía Sáenz y de Jacobo Zabludovsky quedaron unidos y grabados en mi memoria para
siempre.
Luis, dueño y
director del diario El Monitor y
cabeza del grupo regional de militantes
en la Asociación Estatal de Periodistas
Chihuahuenses (AEPCH); y Jacobo, el más conocido comunicador de radio y
televisión en América Latina, y conductor fundador del espacio que en Televisa
dispone, de nueve a once de la noche, de
los ciento veinte minutos de mayor trascendencia informativa nacional
denominado «24 Horas».
Dormía yo un sueño profundo, cansado por el día
bastante ajetreado, en un cuarto del segundo piso del hotel de don Andrés
Burciaga en el centro de Parral, cuando me despertó el timbre del teléfono, que
descolgué y oí una voz grave que se identificaba, me interrogaba, y a la vez me
ordenaba:
–Soy Luis
Salayandía. ¿Ya estaba dormido?
Levántese. Estoy en mi casa pero
ya voy por usted porque es necesario que sepa algo muy importante que acaba de
decir Jacobo Zabludovsky en «24 Horas».
Turbado en grado
máximo; con mil elucubraciones en el cerebro; sentía el golpeteo de la presión
arterial en mis venas, y así, atolondrado de verdad, bajé al vestíbulo y casi
antes de salir del elevador, Salayandía , que estaba ya allí, esperándome,
levantó sus brazos y me atrajo hacia sí, diciéndome:
–Acaba de decir
Jacobo Zabludovsky que usted ganó un premio en el Certamen Nacional de
Periodismo, y vengo para que vayamos a festejarlo con unos tragos de gusto,
unos dos tres antes de que cierren las cantinas,
pues ya casi son las doce, y cierran a la una.
Yo intentaba
hablar pero no podía decir nada. Mi confusión era evidente. No podía dudar de
Luis porque Luis siempre ha sido un
hombre serio. Demasiado serio. Ni pensar por tanto que estuviera «vacilando».
Notó Salayandía mi nerviosismo, y sonriendo, con tono grave, es su estilo, pero
amable, volvía a reiterarme:
–Lo acaba de
decir Zabludovsky. Leyó muchos nombres, pero el suyo lo oí claramente, dijo su
nombre completo, dijo el tema referido a Yepachi, y dijo el nombre de La Crónica de Ciudad Juárez fue publicado.
Me faltaban
palabras para explicarle a Luis que yo era totalmente ajeno a ese
acontecimiento. Que el trabajo de Yepachi no era cosa de otro mundo más que una
simple denuncia de los atropellos que sufren los Pimas. Y que esa había sido la
intención de escribirlo, a instancias de don Aurelio Páez Chavira, director de La Crónica, quien al darse cuenta de mis
solitarios viajes a Yepachi me preguntó ¿qué hay en Yepachi?, y el largo relato
que le hice, en atención a su interés profesional, lo utilizó para ordenarme
«escríbalo»; y se lo escribí; y lo
publicó en La Crónica, pero nunca con
afán de que fuera a certamen, porque no vale la pena.
De siempre
circunspecto, Luis me escuchó con atención. De pocas y muy precisas palabras;
casi inexpresivo en sus emociones y sus afectos, esta vez, allí en la cantinita
de Parral, Luis sonreía. Estaba contento. Estábamos a gusto. Y volvía; insistía
en que yo debía dar por cierto el anuncio de Zabludovsky:
–Lo que dice
Jacobo siempre es cierto. Esto de su premio y los otros premiados los leyó
despacio. Fue lo último del noticiero. Y cuando se quitó los audifonotes, fue
cuando luego luego le llamé a usted, para felicitarlo y felicitarnos porque es
de todos nosotros ese premio. Salud. Salud.
Era la una y
media de la mañana cuando el cantinero se dirigió a Luis con mucha atención,
con mucho respeto, como disculpándose:
–Luisito con
mucha pena, pero es hora de irnos…
Pagó los ocho
jaiboles que bebimos. Cuatro él y cuatro yo. Me llevó hasta la puerta del hotel
que estaba a una cuadra, y al despedirse, me citó para que al mediodía
siguiente, con Ontiveros, con Aldana, con Lupito Chávez, con Manuelito
González, con Chalao y otros tres o cuatro amigos y colegas cercanos,
hiciéramos otros dos brindis en el local de Chalano, antes de que yo me
regresara a Chihuahua.
Espero tener oportunidad de dar a conocer los
nombres, los temas, los medios y el nombre de cada premio de quienes recibieron
el galardón 1973 del certamen que convocaba y organizaba durante muchos años el
Club de Periodistas de México presidido por don Aurelio Sáenz de Miera
Jacobo
falleció el 1 de julio de 2015.
Chihuahua, julio
del 2015
*Premio Nacional
de Periodismo 1973
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