Por Rodrigo Borja
No es que no se esperara; lo que sorprendió fue el medio y su contundencia; a ocho columnas el diario Excelsior, que recién acaba de cumplir 85 años de vida, en la edición del 17 de marzo asesta el golpe: «Investigan los comicios en Chihuahua; DEA indaga dinero sucio en elecciones». Era la forma en que se revestía lo que pretendió ser un duro golpe político a Héctor Murguía Lardizábal, ex presidente municipal de Ciudad Juárez y abierto precandidato a la gubernatura de Chihuahua.
No es que no se esperara, porque luego de la detención de Saulo Reyes Gamboa, era lógico, como se manejó desde hace más de un año en los corrillos políticos que, llegado el momento se «sacara» el asunto a Murguía Lardizábal, para frenarlo en sus proyectos político no de 2009, sino los de 2010.
No importaba que en su momento se hubiera aclarado que fue aceptado como jefe operativo de la policía municipal de Ciudad Juárez, por recomendación del Centro Coordinador Empresarial en general y por instancia personal de su entonces dirigente Ernesto Anaya.
Saulo Reyes, hábilmente había ocultado o mantenido en niveles de mucha discreción los motivos por los cuales fue despedido como coordinador administrativo de
La detención de Saulo
Lo cierto es que a sólo unos meses de haber dejado la jefatura operativa de
Previo a su detención y en hechos diferentes los dos agentes que habían sido escoltas de Reyes Gamboa en la policía y que continuaban a su servicio, fueron ejecutados al estilo del narcotráfico. Por lo anterior se ha especulado ampliamente sobre la detención de Saulo Reyes, que fue más que nada un arreglo para lograr la protección de las autoridades mexicanas.
El asunto de Saulo Reyes, ya fue sentenciado en la vecina ciudad, pero era evidente que saldría a la luz pública y seguirá saliendo cada vez que sea necesario en las lides políticas locales y estatales.
Así fue el martes pasado y se desencadenó una serie de acontecimientos y declaraciones sobre todo, en las que se involucraron los principales agentes políticos de la vida en este país, por el PAN habló el propio presidente de la república y el líder del Comité Ejecutivo Nacional del partido blanquiazul, Felipe Calderón Hinojosa y Germán Martínez Cázares, respectivamente.
Por la contra parte priista, la presidenta del PRI Beatriz Paredes Rangel, Manlio Fabio Beltrones y el gobernador José Reyes Baeza, hicieron lo propio en defensa del partido tricolor y por ende de Murguía Lardizábal, que por varios días se convirtió en el epicentro de la política nacional, ya que en torno a su figura se daba un debate, de alguna manera vergonzoso, como lo dijo ante los banqueros la lideresa del PRI al responder a Germán Martínez, pero inevitable ya que el proceso electoral que culminará el próximo 5 de julio, lo está contaminando todo. Como también era de esperarse.
Se fajó en el primer round…y mal
La misma noche del martes el ex alcalde Héctor Murguía Lardizábal, salió en una entrevista por canal 44 de Ciudad Juárez, y con más enojo que inteligencia defendió su posición, en este primer round se atropelló y tiró golpes a diestra y siniestra.
En el minuto de descanso, se afinó la estrategia, de una pelea que se había anunciado desde enero del 2008, con la detención del multicitado Reyes Gamboa y que en forma automática crea la suspicacia de nexos entre el político y el cartel de los Carrillo Fuentes, ya que el supuesto joven y exitoso empresario era desde hace más de diez años simple y llanamente lo que llaman en los bajos fondos del crimen organizado «un marihuanero», al servicio de
La nota de Excelsior es firmada por la reportera Lemic Madrid, que en el mejor de los casos fue sorprendida por un documento falso que desde hace alrededor de tres semanas circulaba en un Blog que llaman «Chihuahua; tierra de desencuentro», un espacio en internet por supuesto anónimo y por el puro nombre con una tendencia antipriista en general y concretamente anti Reyes Baeza, ya que el lema de gobierno del mandatario estatal es: «Chihuahua; tierra de encuentro».
El asunto pudo haber durado sólo 48 horas, ya que el miércoles 18 de marzo El Diario de Juárez, publicó un amplio trabajo de dos reporteros de El Diario de El Paso: Gabriela Minjáres y Alberto Ponce de León, en el que una vocera de
Citamos la nota de El Diario:
Para confirmar la información manejada en el memorando, este medio buscó datos oficiales tanto en El Paso con
-¿
Tres agentes especiales de
Los agentes afirmaron que «nunca ha trabajado un agente Víctor Pérez con
«La gramática no es correcta. No están ni siquiera completas las frases», agregó la agente especial.
En el fatídico primer round, fatídico para Murguía Lardizábal, endilgó el documento lo mismo a la «perversidad panista» que al «fuego amigo», lo cierto es que no queda claro aún y preciso el origen de la información y la forma en como llegó a las columnas de Excelsior; que en el mejor de los casos, como dijimos en líneas anteriores es que la reportera haya sido sorprendida al igual que su editor
Oportunidad de oro
Sin el conocimiento de las investigaciones de El Diario de El Paso o simplemente desatendiéndolas, en la reunión del los banqueros 19 de marzo en Acapulco, el propio presidente de la república Felipe Calderón Hinojosa en su perorata de una hora de los cuales dedicó
Pero fue el presidente del Partido Acción Nacional, quien dedicó su intervención ante los banqueros para que con todas sus letras y en base a la publicación de Excelsior, acusar al ex presidente municipal de Ciudad Juárez y con ello coligar que los candidatos priístas estaban coludidos con el narcotráfico y pedía una definición del PRI con respecto a la «guerra» que el presidente Calderón, sostiene con los cárteles de la droga.
Beatriz Paredes, con una cara que no ocultaba el enojo, respondió a Martínez Cázares y pidió disculpas a la audiencia por «el espectáculo». Sobre este mismo tema el líder de la bancada priísta en
El periodicazo a Héctor Murguía Lardizábal, ya para el cierre de Semanario, se percibía como un golpe revertido, ya que los medios a nivel nacional hicieron las aclaraciones pertinentes y el candidato a diputado por el II Distrito Federal Electoral, con cabecera en Ciudad Juárez, Héctor Murguía Lardizábal, era declarado candidato ante una multitud de simpatizantes y su tono se volvió tranquilo y su lenguaje corporal nos habla de una persona que no únicamente asimiló el golpe, sino que de alguna manera lo convirtió en triunfo, ya que los medios nacionales le dieron una atención que ni cuando por seis años fue senador y tres alcalde de Ciudad Juárez, gozó. Ahora tenemos a un «Teto» recargado… y encampañado.