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lunes, 8 de febrero de 2010

Escenarios Políticos


Duarte toma en sus
manos la campaña


  • Servando Portillo, la interlocución con el CEN
  • Villalobos, el  enlace con el «compromiso político»

 Por Antonio Pinedo


            El 28 de febrero sabremos si en el Partido Acción Nacional, se hace la «chica» y el juarense Pablo Cuarón Galindo, logra la proeza de sacar de la jugada a quien sólo 48 horas antes de los registros se veía solo en el camino a la candidatura del PAN a la gubernatura: Carlos Borruel Baquera.
            En el Partido Revolucionario Institucional, el complaciente y apapachador César Duarte Jáquez, virtual candidato del PRI a la gubernatura, da paso a un político que cada día toma más decisiones y se rodea de personajes o más institucionales, o más ligados a su propia carrera política y se aleja de los polos de poder priista que  fueron necesarios en la primera etapa del proceso. Marca distancia, pero no llega al rompimiento y seguramente no lo hará, si éste no es necesario, así de pragmático es el precandidato priista.

            A la coordinación un hombre de la CNC
            Después de los escarceos con el rector de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, un personaje en el que confluyen las simpatías y afinidades del gobernador José Reyes Baeza y del pre candidato César Duarte; luego de la declinación del académico, en el que confluían, reiteramos, ambos intereses, el parralense finalmente se decidió por un personaje que es muy cercano a la Confederación Nacional Campesina, de la cual es miembro desde sus inicios en la política el abanderado del PRI a la gubernatura y sobre todo se allega a un político que por lo menos en los últimos 15 años  ha estado muy cercano a Beatriz Paredes Rangel, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI.
            El ex alcalde de Guazapares y ex diputado local y federal, además de líder del sector campesino en Chihuahua por varios años, es la interlocución confiable entre Duarte Jáquez y la presidenta del PRI nacional y por supuesto un político que estuvo en su precandidatura desde muy temprano y por lo tanto hombre de sus confianzas
            Un hombre del primer círculo de Paredes Rangel, pues, es Rafael Servando Portillo, cenecista y duartista. Es sin lugar a dudas un nombramiento en el que la opinión predominante fue la de Duarte Jáquez, que demuestra con ello, que se debe rodear de hombres leales y comprometidos con el proyecto político de llevarlo a la gubernatura.

            Villalobos, el otro enlace
            La mañana en que se dio a conocer en el PRI nacional, que para Chihuahua, se había logrado el consenso de un candidato de unidad, en la persona de César Duarte, el diario El Universal de la Ciudad de México, daba como finalista en esta contienda a Oscar Villalobos y  quien se fue  con la decisión a favor, el ex presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.
            La aseveración del diario decano de los cotidianos de la capital del país, reflejaba que hasta el último momento, Oscar Villalobos y el gobernador pelearon la candidatura para el de Delicias, de ahí que su nombramiento como coordinador del «compromiso político», tenga que ver con la condición de Villalobos, de enlace confiable e interlocución fluida con el gobernador José Reyes Baeza, quien por supuesto pretende dejar en su lugar a un miembro del PRI y le dará a éste toda la ayuda posible, más allá de su voto. 
            Oscar Villalobos Chávez, trabajó incansable en los últimos dos años por toda la entidad, armando una estructura de apoyo a su eventual candidatura, pero finalmente para el uso de quien resultara candidato del PRI a la gubernatura. Muchas reuniones, muchos paquetes de material de construcción, miles de despensas y demás cosas que desde la Secretaría de Fomento Social, se tiene para la ciudadanía en general, convirtieron a Villalobos Chávez, en una especie de «Santaclos», ahora es el momento de explotar esa condición de dador de favores, para convertirlos en votos a favor de César Duarte.
            «Compromiso político» es un mero eufemismo utilizado por todos los partidos políticos, para canalizar en forma abierta la ayuda de sus militantes incrustados en las estructuras de gobierno, las estatales estarán a favor del candidato del PRI y en los municipios en donde gobierna el PAN, harán lo propio por su candidato, así como desde las delegaciones federales de las secretarias de Estado.
            Otro de los rasgos de inclusión e independencia que está mostrando Duarte Jáquez es el desempolvamiento que hizo a Artemio Iglesias, quien deja doce años de ostracismo, por una modesta posición partidista en el noroeste, él quien en alguna ocasión manejó las elecciones estatales de todo el país desde el CEN del PRI… Duarte sigue complaciente y apapachador, pero empieza a demostrar que sabe en donde está parado y que quiere ser gobernador a plenitud.

           

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