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miércoles, 9 de marzo de 2016
Crónica
Más aspectos
serios y curiosos, ocurridos en el Constituyente de Querétaro de 1916-1917
*Barrera Peniche,
periodista yucateco, comenta que en el Constituyente de 1857 había talentos
como Zarco y León Guzmán y otros *Llegó el
gendarme y le dijo a la criada que de orden «superior» debían adormar el frente
de la casa porque venía Venustiano Carranza *Aguirre
Berlanga, subsecretario de Gobernación, llega y atropella a los diutados que ya
habían elegido directiva y le impone otra. *Múgica pude
serenidad y propone acepten las credenciales de los diputados llamados
«renovadores» que obstruccionaron a Huerta
Compila y escribe
Jesús González Raizola*
Escribe don
Alfonso Taracena: «Nov. 14-1916.- Ya están los empleados de la Cámara de
Diputados en Querétaro, y se arregla la capilla donde quedará instalada la
Academia de Bellas Artes, en la que se celebrarán las juntas preliminares del
Congreso Constituyente.
«Nov. 17.- Sale
de la Ciudad de México don Venustiano Carranza. A las ocho de la mañana se
organizó en el Palacio Nacional la cabalgata, pues el Primer Jefe prefiere
hacer el viaje a Querétaro caballo. Lo
siguen los generales Obregón, Urquizo,
Barragán, Fernando Cuén, Gersayn Ugarte y los miembros de su Estado Mayor.
«Después de comer
en Tlalnepantla, el general Obregón
regresa en auto a la Ciudad de Máxico y los cabalgantes prosiguen a Cuautitlán,
donde pernoctan.
«Un vecino de
Querétaro cuenta al historiador Valentín S. Farías: “Figúrese usted que llego
el gendarme a mi casa y le dijo a la criada que de orden superior se adornaran los frentes de las
casas, de la mejor manera que puedan, porque va a llegar el Primer Jefe,
apercibidos de que si no lo hacen, se les impondrá una multa de cincuenta pesos”.
«Nov. 18.- Ya
están en Querétaro, entre otros el general Heriberto Jara y el agrimensor Félix
Fulgencio Palavicini.
«Nov. 20.- Como
don Venustiano aún no llega, los presuntos diputados acuden a una reunión
preliminar en la Academia de Bellas Artes, para cumplir así el decreto de
Carranza, Se precede a elegir mesa directiva. Resulta como presidente un tal
don Antonio Aguilar.
«Por la noche hay
otra reunión preparatoria en la que
Palavicini hace votos por que la obra que desarrollen “sea tan eficaz como la
de Zarco, la de Gómez Farías, la de Melchor Ocampo y la de muchos otros del
´57”.
«La verdad es que
no les llegan ni a los talones. Un periodista yucateco, Barrera Peniche,
comenta que en el Constituyente del ´57
había talentos como Francisco Zarco y León Guzmán, y en el actual hay albañiles
como Matías Rodríguez y meseros como Palavicini. Este así lo confiesa: que fue
mesero del restaurante Sylvain de la Ciudad de México antes de la Revolución.
«Nov. 21.- Otra
junta preparatoria. El subsecretario de Gobernación. Manuel Aguirre Berlanga,
inicia el debate proponiendo elegir presidente de la mesa directiva. Palavicini
observa que ya está electo desde ayer el presidente y Aguirre Berlanga objeta
que si se considera legal la junta de ayer, se desobedece al Primer Jefe.
«Se arma un
herradero, y al fin, se declara por mayoría, ilegal esa junta. Se ponen de pie
los diputados cuyos apellidos comienzan con A. Resulta como nuevo presidente
Manuel Amaya. Por la tarde se procede a elegir la comisión revisora de
credenciales en la que figura Esquerro, que fue Convencionista, delito por el
cual peligra su credencial, y, para salvarse, alega que fue un pequeño error en
su vida Revolucionaria, pues, por lo demás, siempre ha sido leal a la causa y
la ha servido con patriotismo, como pueden testimoniarlo muchos de los
presentes.
«Vuelan en
Querétaro los rumores para explicar el retardo del señor Carranza: que en
Tepeji del Río se presentaron los villistas; que un automóvil explorador fue
volado con dinamita; que Torreón está amenazado por Francisco Villa y tuvo que
enviarse en auxilio de la plaza una buena parte de la escolta de Carranza.
«Nov. 22-1916.-
Marcada división entre los constituyentes en dos bandos: uno netamente carrancista,
encabezados por Palavicini, y otro militarista.
«Por lo demás,
como todos son la misma gata pero revolcada, hoy se dedicaron a jugar rayuela
cuatro de ellos en el Hotel Internacional, mientras los músicos carrancistas
fueron al templo del Carmen, conde cantaron la misa de Pichi a tambora y
platillos, como si fuera una marcha militar, según los testimonios de don
Valentín S. Frías.
«Nov. 24.- Hoy
llega a la una de la tarde a Querétaro
don Venustiano Carranza y se aloja en una casa de la avenida Francisco I.
Madero. Lo fueron a encontrar a la entrada de la ciudad los generales Ignacio
Pesqueira, Cándido Aguilar, Heriberto
Jara, Palavicini, Aguirre Berlanga y otros muchos.
«El gobernador
Federico Montes se adelantó a todos para
integrar la comitiva y ya en la ciudad pronuncia un discurso en el que afirma que Carranza representa la legalidad y
debe, por tanto, mirársele con todo respeto.
«No se quemó
muchos las pestañas para decir eso, pero tampoco Carranza al contestarle y
calificar la obra que saldrá del
Congreso Constituyente con los adjetivos de fructífera, hermosa y notable. La
gente lo ve con curiosidad y lo aplaude poco. Luego se sirve un banquete en La
Cañada.
«Nov. 26.- Llegan
noticias de que Francisco Villa está atacando la ciudad de Chihuahua y los
habitantes, aterrorizados, huyen en trenes que salen repletos hacia Ciudad
Juárez. Los ataques de Villa son por el sur, para que el general Treviño y sus
tropas salgan hacia el norte y se alejen del general Francisco Murguía que ayer
llegó a Ciudad Camargo y a marchas forzadas sigue hacia La Cruz, Estación Ortiz
y Bachimba.
«Nov. 28.- Se
discute la credencial de Palavicini en
la sesión de hoy en la tarde. La impugna furibundamente el diputado tabasqueño
Rafael Martínez de Escobar, a quien Palavicini, al defenderse, llama migajón,
una calabaza y un pollino. Hace Palavicini recuerdos desde cuando escribió un
libro que el diario El Debate llamó
plagio. Alude a la prisión de los ex empleados de Instrucción Pública Adolfo C.
Grajales y Eugenio Morales que lo acusan de robo en dicho ministerio, al
recibir fuertes cantidades de dinero en las compras que se hacían a la casa
editora de la viuda de Ch. Bouret.
«Pero quien hace
la defensa definitiva del Palavicini es el general Cándido Aguilar, que revela,
al mismo tiempo, la toma de Chihuahua por Francisco Villa, la oposición de los
Estados Unidos a la nueva Constitución y el peligro de disparar contra las
tropas norteamericanas que en Veracruz se oponen a que el gobierno de Carranza
reciba una fuerte cantidad de parque.
«Las palabras del
Secretario de Relaciones, Cándido Aguilar, dicen así:
«“Puesto que no
vamos de acuerdo en muchas cosas, diré a ustedes que no vengo a defender personalidades,
vengo a defender la verdad, vengo a demostrar a la Asamblea que está siendo
víctima de intrigas ministeriales; vengo a decir la verdad, aun cuando amigos
míos son el general Obregón y el licenciado Acuña. No quise venir antes al
Congreso porque no tenía licencia para separarme de la Secretaría de
Relaciones, hasta hoy que la obtuve al mediodía. Vengo como dije a decir la
verdad y me considero con libertad para hablar
«“La intriga
contra el señor Palavicini la han tramado el licenciado Acuña y el general
Obregón, y esa intriga vosotros la sabéis, nada más que pocos tiene valor civil
suficiente para enfrentarse, siempre enfrentan con los caídos; esa intriga
viene, señores desde las juntas del Partido Liberal Constitucionalista, en
México, desde el día en que el general Obregón inició sus ataques contra
Palavicini se defendió en distintas formas, esa es la verdad.
«“Si hay alguno
que no le crea que se pare a desmentirme; pero es vergüenza, señores, que
estemos discutiendo la credencial de un hombre que no vale mucho, habiendo aquí
tantos intelectuales, yo no sé porqué le temen a Palavicini, que es un muerto
político.
«“Me extraña que
estemos perdiendo el tiempo en discutir su credencial, cuando tenemos en estos
momentos a Francisco Villa que ha ocupado la capital de Chihuahua; cuando en
estos momentos en los Estados Unidos se intriga porque no se firme la
Constitución y no sólo en Estados Unidos sino también aquí en México. Si es
necesario más tarde se los demostraré con telegramas donde se dice que hay que
a toda costa evitar que este Congreso se lleve a cabo y se firme la
Constitución, porque no le conviene.
« “Y es mentira
que hayamos tenido arreglos con el gobierno americano. No vengo a impresionaros porque ustedes no son
impresionables. Porque ustedes son personas más o menos cultas y consientes de
su deber. Espero que den por terminado cuanto antes este asunto de Palavicini.
« “Espero,
señores jaliscienses y sonorenses (éstos eran obregonistas) que no sigáis
siendo víctimas de vuestra juventud, tened el valor suficiente para ser dueños
de vuestras conciencias. Los constitucionalistas que nos lanzamos
a las armas siempre hemos tenido
valor civil y personal para cumplir con nuestro deber.”»
Y puesto a
votación el caso, resultan 142 votos a
favor de Palavicini y solamente 6 en contra.
(continuará)
*Premio Nacional
de Periodismo 1973
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