Tras los pasos de…. Peña Nieto (bis)

1.- En los últimos tres días dos eventos políticos centralizaron la atención de los sectores cercanos al poder: El Quinto Informe del presidente Felipe Calderón, quien transparente como es —en cuanto a mostrar su talante—, no pudo evitar desdeñar a Enrique Peña Nieto, gobernador del Estado de México, en quien ha personificado su fobia ante el eventual regreso del Partido Revolucionario Institucional al poder. Es necesario recuperar a México, dice Peña Nieto. No pasó desapercibido su saludo en el que el presidente evitó cruzar la mirada en el acto del Museo de Antropología e Historia. Al parecer Calderón lo tiene claro: Peña es el enemigo a vencer. Los tiempos le son altamente favorables al mexiquense, termina su período como gobernador en poco más de una semana.

2.- Sin embargo aprovechó el evento en el Teatro Morelos de la ciudad de Toluca, en donde rindió su último informe, para fijar postura. Durante el mensaje por su Sexto Informe de Gobierno, dijo que la «nueva generación» de la que forma parte tiene el «enorme reto de acabar con el miedo y renovar la esperanza» ante el «ambiente de incertidumbre y preocupación», que se vive dentro del territorio nacional. Previamente había elogiado el apoyo institucional del Gobierno Federal. Primero el deslinde del PRI del siglo XX: «Asumamos lo que somos: una nueva generación de mexicanos que no se resigna, que sabe y quiere demostrar que sí se puede. Una generación que no se define por su edad, sino por su actitud, por su deseo de vencer las adversidades y contribuir a vivir en un país exitoso».

3.-Se fue directo a descalificar el discurso de Ernesto Cordero, delfín de Felipe Calderón, dijo: Que «la mejor oferta política no es la que condena el pasado, sino la que ve hacia delante y convoca a todos a enfrentar los problemas, aquella que mantiene lo que funciona y cambia lo que debe mejorar». Esta generación tiene el «reto de acabar con el miedo y renovar la esperanza» ante el «ambiente de incertidumbre, preocupación e intranquilidad». Siguió fijando posturas para posicionarse como el precandidato fuerte que será a la presidencia de la República. «Es necesario que recuperemos a México como un lugar seguro, con horizonte positivo y capacidad de realizarlo. Ninguna transformación será posible si antes no tenemos claro o no tenemos claridad para realizarlo».

4.- Fue notable la presencia de Diego Fernández de Ceballos, de la profesora Elba Esther Gordillo,  quien no fue saludada en forma especial por el mexiquense, quien públicamente mandó el mensaje de lejanía, por lo menos pública. De su discurso nos quedamos con el trabajar para lograr la paz y la esperanza, en clara alusión a que el actual Gobierno Federal ha llevado a los mexicanos a un clima de violencia e inseguridad, en el que la paz es la gran ausente y ha impregnado el espíritu de los mexicanos de una gran desesperanza. Es claro que empieza a endurecer su discurso y que fija posiciones del precandidato que admitirá ser después del 15 de septiembre que deje el poder en el gobierno del Estado de México. (Rodrigo Borja).