Luego de 3 ó 6 años se vuelve a ser humano
Por Luis Carlos Cano
- Los
funcionarios públicos creen que el cargo les va a durar toda la vida y no
tratan igual a toda la gente, no piensan que en la presidencia municipal son
sólo tres años y en el estado quizá los seis y luego vuelven a la vida de los
humanos, dice el diputado Díaz Monárrez
- Ya tengo
pensado retirarme, el próximo paso será jubilarme de esto, retirarme para
descansar, acabo de cumplir 61 años de edad y creo que es momento de darle paso
a gente nueva que venga con más energía, dice el dirigente de la CTM en esta
frontera
Maestro normalista de profesión, Díaz Monárrez incursionó en la política
sindical cuando trabajaba en la Junta Municipal de Agua y Saneamiento, y luego
de estar al frente del sindicato de esa dependencia, llegó a la dirigencia de
la CTM, en donde dice, ha tenido muchas satisfacciones, una de ellas, haber
creado uno de los sindicatos de obreros más grandes del estado de Chihuahua, el
de la maquiladora Lear, con más de 14 mil integrantes.
Diputado local en tres ocasiones, actualmente forma parte de la LXIV
Legislatura del Congreso del Estado, en la cual es presidente de la Comisión de
Trabajo y Previsión Social, tarea que combina con la representación de la CTM
buscando afianzar los sindicatos de la misma y lograr la creación de otros,
sobre todo, afirma, donde haya patrones abusones. De sus actividades y lo que
implica el sindicalismo en esta ciudad, plática con Semanario.
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—¿Cómo fue su inicio en la política sindical y su llegada a cargos de
elección popular?
—Mi trayectoria de trabajo inició en la Junta Municipal de Agua y
Saneamiento, en donde los primeros años los dediqué al servicio de la
dependencia y posteriormente, al ingresar a la política sindical, participé en
la representación de los trabajadores en las diferentes carteras que tiene la organización,
como secretario de actas, del trabajo y secretario general, hasta que
posteriormente el resto de los secretarios de sindicatos adheridos a la CTM me
eligieron representante de esta central obrera en la ciudad.
En cuanto a los puestos
de elección popular, de 1995 a 1998 fui diputado por el V Distrito
Electoral en la LVIII Legislatura del Congreso del Estado; del 2004 al 2007
ocupé el cargo de regidor del Ayuntamiento de Juárez en la primera
administración de Héctor Murguía Lardizábal; luego del 2007 al 2010 fui
diputado por el II Distrito Electoral en la LXII Legislatura y ahora de nuevo
diputado por el mismo distrito.
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— ¿Al frente de la CTM
como fue su llegada?
— Acabo de cumplir los 20
años como representante de esta central obrera, en la que estuve dos años como
interino, cubriendo el último periodo de Don Luis Parra Orozco, luego de que el
renunciara.
«Posteriormente me eligieron como secretario
general y me hago cargo de la CTM, en donde tengo la satisfacción de haber
cumplido ya los 20 años».
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— ¿Qué destaca de su
trabajo en estos 20 años como dirigente de esta central obrera?
— Mi satisfacción, o lo
que yo considero que es más importante como mi trabajo sindical, fue en el año
2000 haber creado el Sindicato de Trabajadores de la Maquiladora Lear, una
organización que aglutina a 14 mil trabajadores.
«Esa fue una etapa muy difícil para mí, la
considero la más difícil, inclusive peligrosa porque hubo amenazas, me
anduvieron persiguiendo un tiempo, hubo paros, golpes, trabajadores
atropellados en la planta Lear de San Lorenzo y luego en la de la Ejército
Nacional, pero finalmente logramos consolidar el deseo de la gente y la
satisfacción de haber logrado el registro sindical de 14 mil personas es la
coronación.
«Yo creo que no vuelvo a repetir esa hazaña en lo
que me queda de representación o de vida en la CTM, porque fue difícil, aunque
hemos logrado otros sindicatos, pero con membrecías menores de 100 a 500
gentes, pero afortunadamente logramos eso y esa es mi satisfacción más grande».
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—¿Actualmente cuantos
sindicatos tiene la CTM en esta frontera y cuántos trabajadores entre todos?
— Ahorita tenemos 80
registrados legalmente, pero hay 120 contratos, porque hay organizaciones
gremiales y hay industriales que tienen varios contratos, en tanto que
trabajadores miembros de estos sindicatos son alrededor de 20 mil.
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—¿Cual es el sindicato más
grande que forma parte de esta central obrera?
— El más grande en cuanto
a membresía es el de la maquiladora Lear, pero de importancia podríamos hablar
del sindicato de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento, así como el de la
Comisión Federal de Electricidad, pero el que tiene más afiliados en todo el
estado es el de Lear.
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—¿De los agremiados que
tiene la CTM, cual es la organización sindical con más poder y fuerza?
— Bueno, hay fortalezas en
número, en lo económico y en lo político, pero veo al sindicato de la Junta
Municipal de Agua y Saneamiento como progresista, muy democrático y con mucho
poder, porque tiene poder económico y también político; entonces, es uno de los
fuertes aunque numéricamente no le llegue a otros, pero creo que la
representación cuenta mucho.
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— ¿Actualmente, luego de
los años de violencia y crisis económica por los que pasó la ciudad, cómo ve el
clima laboral?
— Bueno, en la frontera,
por las características propias de la ciudad, la gente va de paso, no le
interesa estar aquí y eso no sucede en el sur del país.
«Yo escucho de la decadencia del sindicalismo, pero
la verdad es que nos hacen falta, pues yo considero que mientras haya un mal
patrón, hace falta un sindicato; hemos batallado por esa característica, pero
además los patrones tienen la costumbre o por ideología, de afirmar que el
sindicato es perjudicial, que es malo y tampoco permiten que la organización se
dé, pero lo estamos logrando de poco a poco de fortalecer el sindicalismo».
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— ¿Que tan cierto es eso
de que los sindicatos no permiten el avance de las empresas, y hasta donde es
un estigma ese señalamiento?
— Yo les digo que esto es
un gremio más en la estructura social, que podemos decir que hay buenos y malos
elementos, pues tenemos secretarios sindicales que se les han descubierto cosas
indebidas y nosotros hemos actuado en consecuencia, hemos logrado dar de baja
de 4 a 5 secretarios generales.
«La ventaja que se tiene es que se hace de una
forma secreta, no se pregona, no se da a conocer a la sociedad, pero lo estamos
haciendo para que todos se manejen por lo correcto en beneficio del trabajador.
«En relación al estigma que se tiene en cuanto a
dirigentes sindicales es muy difícil que nos lo quitemos, así trabajemos lo más
honrado posible, yo creo que de todos modos nos van a señalar».
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— ¿A qué atribuye esto, es
acaso porque las empresas se ven menos presionadas al tener trabajadores sin
sindicato?
— Eso es lógico, mire, el
motivo por el que las empresas no aceptan el sindicato es porque la Ley Federal
del Trabajo estipula en unos artículos que los sindicatos tienen la facultad de
reorganizarse, tienen la facultad de negociar con la empresa para el aumento a
los tabuladores del salario y las prestaciones, pero esto no sucede en las
empresas donde no hay un sindicato.
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—¿Cuál es la expectativa
de mejora para los trabajadores en los próximos años en esta ciudad?
— Aún es difícil la
situación aquí por el clima de incertidumbre que se vive en la ciudad o la
crisis económica, se han logrado avances pero aún falta, pero vamos a seguir
luchando porque cada año se revisen los contratos, los tabuladores de salario y
las prestaciones, eso es el trabajo cotidiano que tenemos que realizar.
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—¿En su trayectoria
sindical y política, como diputado, que satisfacciones ha logrado?
— Yo digo que las
satisfacciones que logramos ahí son muchas y además porque negarlo, el
beneficio económico también es muy grande, pero quiero decirle que
indudablemente hemos aprovechado la trayectoria que tenemos y el poder político
que se logra para poder beneficiar a los agremiados.
«Los logros son muchos y los beneficios que se han
obtenido no en lo particular, sino colectivos, a mi me parece que el sector
obrero debería tener siempre una representación en los poderes del estado y no
necesariamente porque recaiga en mí, sino porque la representación que se tiene
es mucha, las necesidades son muchas y a veces nos ven como Dios a los conejos,
´chiquitos y orejones’».
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—¿Ha sentido usted la
necesidad de tener esos cargos para que el trato sea mejor, sea diferente?
— Esto se nota cuando no
tenemos ninguna posición, pues venimos a la presidencia municipal o a las
oficinas del gobierno del estado y como que no somos muy bien vistos si en esos
momentos no tenemos un cargo en el gobierno.
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— ¿A qué atribuye que
se den ese tipo de situaciones, si en su caso se trata de una persona con
trayectoria, que es conocida en la ciudad?
— A la
representación que se requiere para que le den un buen trato, pero también a la
vanidad que tienen los funcionarios que creen que esto les va a durar toda la
vida, no se ponen a pensar que es un periodo. En la presidencia
municipal son tres años y vuelven a la vida de los humanos, mientras que en el
estado, si bien les va, son seis años, pero luego regresan otra vez a esta
sociedad como cualquier persona.
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— ¿Como diputado, cuál es
el proyecto que tiene Jesús José Díaz Monárrez para dejar huella en la
Legislatura?
— Mire, a mi me ha dejado
muchas satisfacciones en las dos ocasiones que estuve ya de diputado, como fue
las reformas a la Ley de Educación, la Ley de la Universidad Autónoma de
Chihuahua y ahorita estamos manejando en conjunto con los diputados del Partido
Acción Nacional la Ley de Creación y Fomento al Empleo para que esto venga a
dar un poco de auge a la apertura de nuevas empresas.
«Se trata también de la obligatoriedad que deban
tener el municipio, el estado y la federación para apoyar con las prerrogativas,
los apoyos que les deben de dar a los empresarios para que estos tengan interés
de invertir en una ciudad y no sea una concesión del gobernante en turno».
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—¿Hablando de inversiones,
cómo ve el panorama para los empresarios juarenses en los próximos meses?
— Creo que si está
mejorando la situación, nosotros lo estamos viendo en las empresas en las que
tenemos contrato colectivo, ya que se han visto contrataciones nuevas, no en la
magnitud en que se dieron en años anteriores, por ejemplo, volvemos a poner a
Lear, que en años anteriores contrataba mil 800 empleados y ahora está
contratando 100 a 200 gentes por quincena, pero es constante, frecuente.
«Sin embargo, en la medida en que ya no haya
contrataciones o se den nada más bajas y gente que se corre, ahí nos debemos de
preocupar, pero el hecho de que estén contratando nos dice que va mejorando la
situación».
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— ¿En ese entorno de
trabajo, que les dice el dirigente de la CTM a los trabajadores y empresas?
— Definitivamente dicen
por ahí que cada quien habla de la feria de acuerdo a como le va en ella, y a
mí me ha ido bien en la representación sindical, yo he tenido satisfacciones en
todos los aspectos, económicas, sociales, políticas y creo que mi consejo seria
a los trabajadores que estén en empresas donde no haya una organización
sindical, a que se unan, a que pregunten primero como viven los demás
trabajadores que están agremiados a un sindicato y a los empresarios decirles
que en los sindicatos de la CTM siempre tendrán el apoyo.
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— ¿De qué forma esta
central obrera ha respaldado a las empresas donde están sus afiliados?
— Nosotros hemos apoyado
incluso en andar perifoneando en las colonias cuando no se podían conseguir
empleados; lo hicimos en ayuda a las empresas y ahora a la inversa, nos hemos
prestado para que aquellas prestaciones que no inciden mucho o no repercuten en
la economía del trabajador, suspenderlas temporalmente hasta que mejoren las
cosas. Esto es la forma de auxiliar a los patrones en tiempos difíciles.
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— ¿En el caso de los
trabajadores, de que otra forma los apoyan para que progresen dentro de una
empresa?
— Definitivamente nosotros
siempre estamos tratando de ser progresistas, hemos pedido cursos de superación
personal, de apoyo para que los trabajadores se vayan concientizando de que la
fuente de empleo es tan importante para nosotros como para los patrones.
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— ¿Luego de 20 años al
frente de la CTM, cual es el siguiente paso, habrá reelección para otro
periodo?
— Si mire, cada tres años
hay una elección, pero desgraciadamente aquí nosotros tuvimos un deceso muy
sentido para nosotros que fue el de Don Arturo Ávila Fierro, que fue muy
combativo y uno de los contrincantes que siempre tuve cada elección, pero viene
ya la elección en septiembre de este año y mi interés es seguir un periodo más.
«Sin embargo, tengo ya pensado retirarme, ya estoy
jubilado de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento, así como del magisterio,
por lo que el próximo paso será jubilarme de esto, es decir retirarme para descansar,
yo acabo de cumplir 61 años de edad y creo que mi vida útil debe terminar,
darle paso a gente nueva que venga con más energía».
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—¿Hay algún prospecto que
usted consideraría para que lo sustituya?
— Tenemos dos gentes muy
preparadas, muy activas, pero no quisiera mencionarlas porque uno de ellos si
anda figurando y sería como quemarlo antes de tiempo, yo creo que es buen
prospecto y ojala no me equivoque, pero aún hay que esperar.
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