Elecciones 2016: Inicia el proceso para suceder a Duarte

Por Antonio Pinedo

            A sólo unos  cuantos días de las votaciones del siete de junio, el presidente municipal de Juárez Enrique Serrano, abrió el juego por la gubernatura, dijo que está abierto a esa posibilidad, y en el caso de que tuviera la oportunidad de llegar la candidatura es decisión de su partido.
            A pregunta expresa, comentó que hoy gobierna Juárez y cumple con la encomienda que le otorgó la ciudadanía y que no le importa el tiempo que dure la próxima gubernatura, pues refirió que «lo importante es atender adecuadamente a la población».

            El alcalde juarense no únicamente se abre en búsqueda de la gubernatura sino que avala la propuesta de que ésta sea de sólo dos años, idea que inició el gobernador en su cumpleaños en abril pasado y que llevó al Congreso estatal como propuesta, la  diputada del PRD Hortensia Aragón.

            Como respuesta al destape de Serrano Escobar, la también priista  Lilia Merodio Reza, respondió con un «no me descarten». La senadora de origen juarense ha impresionado por su meteórica carrera política y su llegada al Senado dejó estupefactos a más de un observador político que no le veían estatura para llegar a tales alturas, descartar su capacidad de sorprender puede ser un error, pero definitivamente no parece estar en los primeros lugares de la larga línea de aspirantes.

            Hasta el momento son los únicos dos priistas que han manifestado abiertamente su deseo de ir por la gubernatura. Pero no olvidemos lo que decía  aquí en Chihuahua el «Filósofo de Rubio» Artemio Iglesias: «en política lo que parece, es», frase que aparentemente es del cuño de Jesús Reyes Heroles.

            Por lo tanto en la carrera está también Héctor Murguía Lardizábal, quien la buscó abiertamente hace seis años y nada indica que haya cambiado de opinión, además ha dedicado estos años de ex presidente municipal a desarrollar labor política en la capital del país y mantiene esperanzados a sus aliados locales y aun cuando haya dicho que hay que «esperar los tiempos» en respuesta al destape de Serrano Escobar, lo cierto es que su labor en pos de la gubernatura, o mejor de la candidatura del PRI a gobernador, no ha tenido pausa ni descanso en sus esfuerzos por crear el escenario político afín a su propósito.

            Por su parte Marcelo González Tachiquín, quien también se encuentra en la larga fila de aspirantes se concretó en decir, «él tendrá sus razones, yo esperaré los tiempos».

          El secretario de Educación, Cultura y Deporte amplió su dicho: «Yo he sido educado, políticamente tengo 25 años militando en el Partido Revolucionario Institucional y he sido educado a ser profundamente respetuoso con el tiempo que marca el partido, en mi lógica, en mi idiosincrasia política, cuando todavía ni siquiera termina el proceso electoral del 2015, porque termina en el mes de septiembre cuando se agoten la impugnaciones o lineamientos que pueda dar el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación», así el secretario de Educación, marca distancia de los estilos de Serrano Escobar.

            Lo cierto es que González Tachiquín trabaja sin descanso en búsqueda de la candidatura priista, esta ingente actividad llevó al propio Serrano Escobar a decir que es  «torbellino que recorre todo el estado».

            Luego de los resultados electorales del pasado siete de junio, el alcalde juarense anda de buen humor, contento, confiando en un futuro promisorio. Caso contrario el de Javier Garfio Pacheco, quien hasta antes de la elección por lo menos formaba parte de la lista y la situación ha cambiado desfavorablemente desde el domingo siete, sin embargo, hay otro dicho en la política mexicana que reza : «en política nadie está completamente vivo, ni completamente muerto».  

            Los precandidatos

            Aun cuando aparentemente sólo dos se han pronunciado en el sentido de que ven en su futuro la candidatura del PRI a la gubernatura de Chihuahua: Enrique Serrano Escobar y Lilia Merodio Reza, lo cierto es que la lista que se ha prefigurado desde hace varios meses,  sigue inalterable, ya que en política no se improvisa y cuando se hace viene el fracaso, ejemplos hay muchos.

            Es claro que el llamado «encuentro de la unidad», aquel almuerzo en casa del ex gobernador José Reyes Baeza, al que acudió  César Duarte Jáquez, le dio nuevos bríos al proyecto de baecismo de llevar a Marco Adán Quezada, ex alcalde de la ciudad de Chihuahua, a la gubernatura, recordemos que el resultado inmediato de dicho encuentro entre miembros de los equipos políticos del actual gobernador y su antecesor, fue una gira de dos días a la frontera de Ciudad Juárez de  Quezada, quien tuvo encuentros de carácter político y una cena con la familia Fuentes Varela, en la ciudad de El Paso.

            La senadora Graciela Ortiz González, está en la construcción de su propio escenario o por lo menos eso parece indicar con sus viajes a diversas ciudades de la entidad y por supuesto a Juárez, incluso cuando los haya suspendido durante las campañas políticas recientes.

            Entonces el partido dominante en la entidad, el PRI, tiene en la puja por la candidatura a la gubernatura a por lo menos seis políticos: Los ex alcaldes de Juárez y Chihuahua, Teto Murguía y Marco Adán Quezada, respectivamente; las senadoras Graciela Ortiz y Lilia Merodio Reza; los alcaldes de Chihuahua y Ciudad Juárez, Javier Garfio Pacheco y Enrique Serrano Escobar y el secretario de Educación, Cultura y Deportes, Marcelo González Tachiquín.

            La anterior es la lista de los que quieren y pueden, por supuesto en escenarios muy diversos. De hecho las posibilidades de Garfio Pacheco —muy menguadas—, de Serrano Escobar y de González Tachiquín, están ligadas a la habilidad del gobernador Duarte para impulsar a un sucesor.

            Marco Adán Quezada está básicamente en manos de la capacidad de negociación de su compadre el ex gobernador José Reyes Baeza y Murguía Lardizábal, tiene puestas sus esperanzas en Arturo Montiel, ex gobernador del Estado de México, con quien tiene una relación política de alrededor de una década.

            Una lista corta

            Sin embargo siempre hay la posibilidad de hacer un análisis concienzudo y dejar a un lado los deseos de los políticos y concentrase en las circunstancias que los rodean. En esta línea de pensamiento está una candidata muy fuerte y bien posicionada en el centro del país: Graciela Ortiz González y al parecer tiene enfrente a Enrique Serrano Escobar; una gubernatura de dos años aumenta las posibilidades del alcalde juarense, en la medida de que la senadora, si se da el caso, prefiera esperar hasta el 2018, en donde las circunstancias serían muy similares, ya que el actual equipo en el gobierno federal, tiene posibilidades de continuidad. En menos de seis meses se define la situación ya que las próximas elecciones también serán en junio y el proceso inicia a final