Por Rodrigo Borja
Después de 13 años de retrasos y
de pifias, no cayó nada bien que el gobernador haya declarado que si el día último no está funcionando la primera troncal, dejaría de llamarse como se
llama. Lo primero que vino a la cabeza fue la actitud autoritaria de un
gobernante atosigado por las críticas. No se programa una visita ni un
banderazo de inicio para la fecha señalada, lo cual para muchos fueron malos
augurios. Sin embargo el sistema funcionó y César Horacio Duarte Jáquez, sigue
respondiendo al mismo nombre de antes. El sistema contra todos los pronósticos,
funcionó y funciona con gran éxito.
Ahora lo que los juarenses
desean más, es ver la construcción de nuevas líneas. Está comprobado que el
sistema funciona y el cuidado a los detalles hasta ahora ha sido el adecuado,
lo que no se debe es bajar la guardia.
Conservar el nombre
Se desplegó a una gran cantidad
de personal de dependencias estatales y municipales, aparte de prácticamente todo
el departamento de Tránsito, para el día último del mes de noviembre y hasta el
momento los juarenses han utilizado el servicio se han mostrado satisfechos y
las quejas han sido mínimas.
Los 40 camiones con los que
inició el servicio de la troncal que viene por el boulevard Zaragoza, iniciado
en Tierra Nueva y culminado en la Unidad Administrativa Benito Juárez,. se
realiza en un tiempo menor al que los camiones ordinarias hacen en las mismas
distancias.
La necesidad de más camiones ya
es manifiesta. De hecho desde el primer día se vio la insuficiencia de unidades
y algo que es de notar es que los camiones no tocan los últimos «corridos
perrones» a todo volumen y los choferes se dirigen con comedimiento a los usuarios,
situación que no es común, sino todo lo contario en las unidades normales de
transporte, comúnmente llamadas ruteras.
La actitud de los usuarios misma
cambio por arte de magia, exigen limpieza en las unidades y el trato en general
es muy civilizado, es mas común ver que jóvenes ceden sus asientos a adultos
mayores. En fin, es un cambio de actitudes que en todo beneficia a la salud
mental de esta rezagada frontera.
Así terminan trece años de
errores y despilfarro que indignaban a los juarenses. Se calcula que el gasto
para echar a andar esta primera troncal fue de 700 millones de pesos, por la
enorme cantidad de errores y el frecuente abandono del proyecto por las
autoridades municipales que nunca le quisieron dar continuidad. Tuvo que ser el
gobierno del estado, quien se diera a la tarea de poner a funcionar el sistema
de transporte semimasivo.
Un sistema de transporte como el
inaugurado el día ultimo del pasado mes en Ciudad Juárez se ha implementado en
ciudades como la capital del país, León, Guanajuato, Chihuahua-capital,
Guadalajara y Aguascalientes, lo anterior no tendría nada de extraordinario
sino fuera porque fue en esta ciudad hace 20 años, cuando por primera vez se
concibió un sistema de transporte con estas características, que básicamente
son carriles del centro, los carriles de alta velocidad, destinados en
exclusiva para el transporte público. La idea en 1993 la trajo de Curitiba en
Brasil, el ex alcalde Francisco Villarreal Torres,
Mientras llegan nuevas líneas
troncales el gobernador César Duarte, conserva su nombre. Se cumplió, contra
todas las expectativas.
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