Bienvenidos

La apertura de este espacio, conlleva la intención de interactuar con los lectores de la revista Semanario del Meridiano 107, conocer sus opiniones, enriquecernos con sus comentarios y complementar nuestros servicios editoriales.
Este sitio se ve mejor con Firefox de Mozilla. Descarguelo haciendo click aqui.

jueves, 4 de diciembre de 2014

Represión a manifestantes 20 de Noviembre; se asoma el ´68


Por Rodrigo Borja
 El presidente Enrique Peña Nieto declaró que con el pretexto de los desaparecidos en Iguala, han ocurrido hechos violentos que buscan la «desestabilización» de su gobierno y crear «desorden social», atentando con ello al proyecto de nación, que encabeza desde hace dos años y que con ello se trata de echar por la borda el país posible con las once reformas estructurales.
    Lo anterior lo dijo en un evento en el Estado de México, luego de su visita a China y Australia, estas declaraciones despertaron preocupación inmediata en más de un observador político, que vio en ellas palabras parecidas a las utilizadas en el discurso oficial en los días previos al Dos de Octubre de 1968.
     Los acontecimientos del día 20 de Noviembre luego, de la concentración en el Zócalo, encabezada por las madres de los 43 desaparecidos de la escuela Isidro Burgos de Ayotzinapa, sólo aumentó la preocupación.
    La noche de ese jueves once jóvenes fueron detenidos, y acusados de cargos con mayores penalidades que los que le intenta fincar al ex alcalde de Iguala y su esposa José Luis Abarca y María de los Ángeles Pineda Villa, respetivamente. Los once detenidos fueron inmediatamente trasladados a cárceles de alta seguridad en Veracruz y Nayarit.

El discurso de Cuautitlán
        En un discurso en el Estado de México, aseguró que su gobierno está firme y decidido a seguir trabajando por un proyecto de nación que genere bie-nestar para más mexicanos y de acelerar el ritmo de desarrollo y crecimiento.
    «Al amparo de esta consternación social que hay por los hechos de dolor y de horror (...) hemos advertido los movimientos de violencia que, al amparo y al escudo de esta pena, pretenden hacer valer protestas que, a veces, no está claro su objetivo», advirtió .
    «Pareciera que respondieran a un interés general de generar desestabilización, de generar desorden social y, sobre todo, de atentar contra el proyecto de nación que hemos venido impulsando».
    Peña Nieto insistió ante los asistentes: «No nos vamos a detener. Pareciera que algunas voces, unidas a esta violencia y a esta protesta, algunas de ellas fueran aquellas que no comparten este proyecto de nación; que quisieran que el país no creciera».
El Presidente dijo que las reformas estructurales, «sin duda, han afec-tado intereses, de los que mucho tienen y de otros que se oponen al proyecto de nación».
    Habló como si no fuera bastante motivación, para las grandes manifes-taciones que se han dado en todo el país, la gravedad de que policías municipales entreguen a 43 estudiantes normalistas a narcotraficantes y estos los hayan asesinado y luego cremado en un basurero de Cocula, Guerrero.
    Habló como si la conspiración contra su gobierno fuera tan generalizada que manifestaciones y demandas sobre el regreso con vida de estos 43 estudiantes no se estuvieran dando en más de un centenar de ciudades en el mundo y en por los menos 30 países, habló como si una conspiración global tratara de afectar a su proyecto de país. No considero siquiera que la indignación popular fuera auténtica.
    Preocupan las palabras del presidente, porque en los eventos posteriores al mitin del Zócalo, tuvieron un replica por parte de infiltrados, entre los que se puede encontrar más de un Arístides Avilés, quien fue desenmascarado por los estudiantes de la Universidad Autónoma de México y el periódico El Universal, documentó, como se encontraba entre los miembros del estado mayor presidencial, en el primer intento de la quema de la puerta principal de Palacio Nacional.
    Lo anterior se presta a la sospecha de que los infiltrados vienen de las propias instancias oficiales, que tratan de desacreditar manifestaciones pacificas con actos vandálicos y justificar de esta manera la mano dura, la represión por parte de las policías federales.

Peña acusa afán por desestabilizar al país
    En su discurso en Cuautitlán, el presidente de la república, Enrique Peña Nieto, advirtió que las manifestaciones que se han realizado en los últimos días, especialmente las que han venido acompañadas de actos vandálicos que toman como bandera el caso Iguala, «pareciera que respondieran a un interés de generar desestabilización, desorden social y, sobre todo, de atentar contra el proyecto de nación que hemos venido impulsando.
     «El gobierno de la República está firme y decidido a seguir trabajando por un proyecto de nación que genere bienestar para más mexicanos, de acelerar el ritmo de desarrollo y crecimiento que queremos para todos los mexicanos.
    «No nos vamos a detener. Pareciera que algunas voces, unidas a esta violencia y a esta protesta, algunas de ellas fueran aquellas que no comparten este proyecto de nación; que quisieran que el país no creciera; que quisieran que el país frenara su desarrollo», enfatizó.
    El discurso del presidente Peña nieto, se replicó de inmediato por el gobernador del Estado de México y por Manlio Fabio Beltrones, jefe de la bancada priista en la Cámara de Diputados.
    Un día anterior el primer mandatario, se mostró muy enojado, por los señalamientos de conflicto de interés en la compra o adquisición de la llamada «Casa Blanca», residencia de siete millones de dólares, ubicada en Sierra Gorda No. 150, del fraccionamiento más caro del país. Lomas de Chapultepec.
    Se siguen acumulando motivos de protesta e indignación popular y el gobierno federal, hasta el momento no acata a dar con posibles soluciones, sobre todo porque la demanda más importante es la aparición de los 43 normalistas, que según detenidos fueron asesinados, cremados , molidos  y en bolsas tirados al río San Juan.
    El discurso presidencia del de Cuautitlán, sólo ha venido a crear incertidumbre y alimenta el temor de una gran represión a las movilizaciones po-pulares que se dan en todo el país.

No hay comentarios: