Bienvenidos

La apertura de este espacio, conlleva la intención de interactuar con los lectores de la revista Semanario del Meridiano 107, conocer sus opiniones, enriquecernos con sus comentarios y complementar nuestros servicios editoriales.
Este sitio se ve mejor con Firefox de Mozilla. Descarguelo haciendo click aqui.

jueves, 21 de mayo de 2009

Tras influenza regresa la normalidad: Desempleo, pobreza y narcoviolencia



Por Rodrigo Borja

Luego de que se relajaron la medidas sanitarias por el brote de influenza, la normalidad llega a Chihuahua y al país: nuevamente en los primeros niveles de los temas que dominan la agenda nacional está el creciente desempleo, que en el lo que va del año se acerca al medio millón de desocupados, de los cuales casi un 25 por ciento corresponde a Ciudad Juárez.

Los asesinatos al estilo del narcotráfico vuelven a ocupar las primeras planas de los medios de comunicación o espacios importantes en los medios electrónicos y el conteo en lo que se refiere a Ciudad Juárez ya superó los 550 asesinatos en lo que va de 2009 y en el país son más de 2,500 los muertos, o sea que la frontera en particular continúa con su primer lugar en narcoviolencia ganado desde el año pasado, no obstante la presencia oficial de alrededor de 8 mil elementos del ejército y de agentes federales.

ESTAMOS EN EL PEOR MOMENTO
Pasado lo más drástico en cuanto a las medidas sanitarias para la influenza, la realidad que siempre estuvo de trasfondo, aun cuando los medios de comunicación masiva la ignoraron por alrededor de un mes, vuelve a imponerse.
No se habla para nada de los más de 26 millones de mexicanos en pobreza extrema, cuyo número seguramente está aumentado cada día, dadas las contingencias económicas, que han convertido «al catarrito» anunciado por Agustín Carstens, Secretario de Hacienda y Crédito Público, en algo parecido a un mal endémico visto con optimismo o como un cáncer terminal, para los pesimistas.

EL PEOR TRIMESTRE
El director de Análisis Económico del Centro Económico para México (CAPEM), César Castro Quiroz, afirmó que durante el primer trimestre del presente año la caída en la economía fue del 8.1 y que se espera que alcalce por lo menos un 8.2 para el segundo semestre que actualmente estamos viviendo.
Afirmó que fue mayor el daño por las medidas tomadas por la emergencia sanitaria, que los daños causados desde hace nueve meses cuando se manifestó en todo el mundo la crisis económica originada por los créditos hipotecarios en los Estados Unidos.
El daño a la economía por las medidas sanitarias, paralizó el aparato económico que produce el 65 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
Por su parte el secretario de Hacienda Agustín Carstens, volvió a ajustar sus pronósticos sobre la cabida de la economía para el presente año, y paso de un 4.1 a un 5.5, muy similar a la sufrida por el error de diciembre de 1994 y que se manifestó en la crisis económica más profunda de los años recientes en 1995.
Sin embargo otras entidades que también realizan pronósticos financieros como en el caso de Ixe Grupo financiero, adelantan que la contracción de la economía será del 6 por ciento y adelantan que será hasta el próximo año cuando se vea una recuperación económica, que puede ser de un modesto uno o dos por ciento.

CRECIENTE DESEMPLEO
En lo que a puestos de trabajo perdido se refiere solamente en enero fueron 336,414 y se calcula que para finales de mayo superará el medio millón. La inflación en los últimos doce meses es de 4.44, siendo los meses transcurridos del 2009 los que más altos índices han alcanzado, lo que significa una pérdida en el poder adquisitivo de los trabajadores, prácticamente de un 2.5 por ciento.
Se prevé que la desocupación durante el presente año podría llegar a cerca de un millón de personas, sin contar los jóvenes que deberían incorporarse al merca-do de trabajo, lo anterior en base a pronósticos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI).

LA NARCOVIOLENCIA
La creciente preocupación por la incontrolable narcoviolencia en México, preocupa cada vez más a los Estados Unidos, en donde la ola de secuestros que se están presentado en la ciudad de Phoenix, Arizona, ya la colocan como la capital del secuestro en los Estados Unidos y sólo en segundo lugar en el continente, únicamente por debajo de la capital mexicana y por encima de Bogotá, Colombia.
Según las autoridades norteamericanas, son secuestros que repiten el modo de operación de los sucedidos en el Distrito Federal y otras ciudades de la república desde hace varios lustros e incluso las cantidades que se piden son francamente pequeñas, como lo podrían ser 2,500 dólares por entregar al familiar secuestrado y las amenazas para presionar a los familiares son las mismas que en México: cortar un dedo, una mano, una oreja.
Esta creciente ola de violencia que ya traspasa las fronteras ha obligado al Buro Federal de Investigaciones (FBI) a instalar en la ciudad de El Paso, Texas, un Centro de Inteligencia para toda la zona fronteriza, según manifestó el director del organismo Robert Muller.
De 2008 a la fecha son más de ocho mil muertos en todo el país por la violencia desatada entre las bandas del narcotráfico y más de dos mil de esos crímenes se han dado en Ciudad Juárez, que con mucho es la ciudad más insegura del país.
Luego de varias semanas en que la atención publica se centró en los tapabocas, en no saludar de mano y de unas vacaciones forzadas en todos los centros escolares del país, la nación vuelve a su estado normal de los últimos tres años, creciente violencia derivada de las actividades de los narco-traficantes, acelerado deterioro de la economía y pérdida de empleos y por supuesto un aumento en la depauperización de los mexicanos. Regresamos a la normalidad.s


No hay comentarios: