Tras los pasos de… Juan Blanco

1.- Hay clichés o frases hechas que vienen muy bien al caso, por ejemplo Juan Blanco «está en el ojo del huracán». Este tipo de frases desgastadas por el uso frecuente de ellas llegan a perder el significado primigenio, sin embargo es exactamente en donde se encuentra en estos momentos Juan Alberto Blanco Zaldívar, apenas acercándose a la cincuentena, este chihuahuense, no imaginó hasta el 2004 que la vida puede estar llena de emociones, de ratos amargos y de pleno disfrute. Egresó de la UACH como contador público y pronto inició una prospera carrera en los negocios, al crear la empresa de comida «Pizza del Rey», que en la capital del estado es un cadena importante e incluso incursionó con poco éxito en el mercado de Ciudad Juárez.

2.- Los primeros cuarenta y cuatro años de su vida Juan Blanco, los pasó relativamente tranquilo, era un empresario exitoso en su ciudad natal y su carrera en los negocios le abría las puertas de los cerrados círculos sociales de la ciudad de Chihuahua, ya que si bien no venía de una familia humilde, tampoco pertenecía a la crema y nata de la sociedad chihuahuense, que remonta sus orígenes al porfiriato. Blanco Zaldívar, no viene de las familias que se enriquecieron comprando a precios de ganga los bienes de «manos muertas» que los liberales del siglo XIX remataron con gran disgusto de la Iglesia, aunque hoy son de persignada diaria y a veces hasta su novenario antes de ir a descansar. Juan Blanco pues, vendría en gran medida a considerarse de la generación de los «hijos del esfuerzo».

3.- Pero sucedió que a finales del 2003 los panistas buscaban un candidato con el carisma y empuje necesarios para tratar de ganar la capital de la entidad, ciudad que no gobernaban desde el trienio de 1983-86, cuando la gobernó Luis H. Álvarez. En la presidencia de CANACO se encontraba nuestro muchas veces citado Juan Blanco. Había demostrado soltura ante los medios de comunicación y una simpatía que siempre le va bien a los candidatos a puestos de elección popular. Los panistas capitalinos estaban dispuestos a utilizar la fórmula que en Ciudad Juárez se usó en 1983 con Pancho Barrio. Entonces se recurrió a un candidato externo, pero que demostraba afinidad ideológica con los del partido blanquiazul.

4.- Blanco llega entonces a la candidatura del PAN a la presidencia sin una previa militancia. Gana en buena parte por sus dotes personales, pero mucho le ayudó Martha Laguette, que paseaba su arrogancia por toda la ciudad pidiendo el voto. Ya sentando en la alcaldía, le agarra gusto al gusto; se ve cómodo en el palacio municipal y realiza una alcaldía de gran cercanía con la ciudadanía, populista podría decir sus detractores. La experiencia le es tan grata que empieza a elucubrar como dar el paso a gobernador, entre otras cosas se pone frente a Baeza, como la representación de la oposición. Ahora la incertidumbre es lo que lo rodea, cualquier abogado dice que es inelegible para el puesto, pero siempre han existido salidas políticas, legalmente está muerto para política inmediata, con esto nos referimos al 5 de julio. (Rodrigo Borja).