Siguiendo los pasos de Oscar Villalobos (bis)…

1.-Oscar Villalobos Chávez, era el líder estatal del Partido Revolucionario Institucional, cuando César Duarte Jáquez llegó a la presidencia del Comité directivo municipal del PRI en la ciudad de Parral, y empezó su meteórica carrera política con una modesta candidatura a la diputación suplente al Congreso Federal a llegar trece años después a la virtual candidatura del PRI a la gubernatura. Villalobos Chávez en aquellos momentos era un líder estatal muy comprometido con la precandidatura de Artemio Iglesias Miramontes, quien por otra parte era el político priista con mayor estatura y vigencia en la entidad. Viene al caso el hablar del ex precandidato a la gubernatura de Chihuahua, porque en él se conjugan una serie de características que lo ponen en la tesitura de ser el coordinador general de la campaña de César Duarte luego del 28 de febrero.

2.- Es un personaje que conoce al PRI desde hace décadas y desde sus entrañas, es claro que es de las confianzas del gobernador José Reyes Baeza, de quien se dice incluso que mantienen un parentesco familiar. Oscar Villalobos, por otra parte estuvo más de dos años trabajando como titular de la Secretaría de Fomento Social, que es la más amable de las dependencias estatales de primer nivel, dado que su labor es un poco como la de Santa Claus, pero todo el año. En su proyecto personal hacia la gubernatura, el cual evidentemente no cuajó, se dedicó de tiempo completo a realizar una labor de carácter político y tejer una red estatal, que ciertamente era para su eventual llegada a la antesala de la gubernatura, pero que a final de cuentas sirve para quien haya resultados el candidato de unidad en este caso César Duarte.

3.- Oscar Villalobos tiene un peso especifico en la política estatal, fue quien le dio la primera oportunidad a Duarte Jáquez en la política partidista y su cercanía con el gobernador es incuestionable, lo cual lo hace un precandidato a la coordinación general de la campaña constitucional, muy adecuado, aunque no el único, le pueden pelear la posición personajes de la política priista como Mario Tarango o Sergio Granados, lo que es claro, es que debe ser un personaje que maneje una buena interlocución entre el gobernador saliente y el candidato del PRI; quien mejor reúne tales cualidades es el de Delicias, quien tiene todo para ser un coordinador adecuado y acarreador de votos a la causa de César Duarte y de pasada le asegura una posición importante en el gabinete ante el eventual triunfo de Duarte, hoy por hoy, el primer escenario.

4 Es importante hacer notar que la candidatura de unidad lograda por el PRI en torno al parralense, conlleva el cumplir con una serie de compromisos. En una actitud más cínica, el pastel es muy grande y da para todos, como siempre ha sucedido en la política mexicana y por supuesto estatal y no sólo cuando se refiere uno al PRI, sino en el caso del PAN y el PRD, que son los principales partidos políticos a nivel nacional. Se da por hecho que las candidaturas del PRI a diputaciones servirán para pagar compromisos, pero es evidente que los acuerdos de mayor envergadura se tuvieron que dar con los cinco precandidatos perdedores. «Teto» tiene la coordinación de Juárez y busca colocar a su candidato a la alcaldía, Cano Ricaud, la coordinación de Chihuahua; Rodríguez Moreno va por la alcaldía de Chihuahua y Villalobos, por la permanencia y una segunda oportunidad a la gubernatura.  (Rodrigo Borja).