De Fuentes confiables

*El juego electoral

Los enterados dicen que para el día quince del mes en curso, el Partido Revolucionario Institucional, dará a conocer su convocatoria para las elecciones del presente año, en las que se juegan las presidencias municipales y las diputaciones locales. Y como van por un candidato de unidad, no se espera una cascada de renuncias sino una sola. En el caso de Chihuahua la de Javier Garfio Pacheco, secretario de Obras Públicas de Gobierno del Estado o de Marcelo González Tachiquín, director de Pensiones Civiles  y por Ciudad Juárez, la del diputado Enrique Serrano o la del Fiscal General, Carlos Manuel Salas.

*El dicho

Por cierto de los cuatro el único que ha dicho con todas sus letras que en el mes de marzo, renuncia, para ir en búsqueda de la presidencia municipal, en este caso de la frontera, es Carlos Manuel Salas. De ser cierto lo que dijo, en los próximo ocho días se dará la dimisión.

*Los sucesores

En el caso concreto de la renuncia de Carlos Manuel Salas, se habla de que su lugar puede ser ocupado por el ex alcalde de Delicias, Guillermo Márquez Lizalde. Aunque para nadie es un misterio la gran amistad del gobernador con Jorge González Nicolás, Fiscal Zona Norte, quien también ha sido mencionado, pero no aparece como favorito.

*Versiones…muchas versiones

En plena temporada de especulación política, se dice que si el candidato a la presidencia municipal de Ciudad Juárez, no es el diputado Enrique Serrano Escobar, éste se irá de enroque a la Secretaría General de Gobierno, y el actual secretario, Raymundo Romero Maldonado, pasaría como líder de la diputación local.

*Fe de error

Por motivos totalmente desconocidos para este columnista, pero como presuntos responsables los fantasmas de las computadoras, en el número anterior de Semanario (1073) se da un llamado a Fuentes Confiables y en el interior misteriosamente nada hay. Bien, lo que decía es que el titular o ex titular del Fideicomiso de Obra Pública (FIDOP),  Arturo Domínguez Esquivel, se pasea de arriba para  abajo por los pasillos y elevadores de la alcaldía, con una cara de hombre feliz, como si las irregularidades en FIDOP, no tuvieran la menor importancia o no se tuviera que rendir cuentas a nadie… feliz, el famoso «Borrego» Domínguez.