Escenarios políticos

El prometer no empobrece…

Antonio Pinedo

    En poco más de un mes se elegirán al gobernador, a 67 presidentes municipales y 22 diputados al Congreso local   entre otros puestos de elección popular y estamos entrando al mes crucial, a los últimos treinta días en que se lanzan con todo los dos partidos predominantes en Chihuahua:  el Partido Revolucionario Institucional y el Partido Acción Nacional. Sin embargo, por las promesas de uno y otro podemos columbrar quienes de ellos tienen la mejor noción sobre los problemas a que se van a enfrentar.

Las promesas puntuales
    Tanto Carlos Borruel, como César Duarte, han esbozado sus principales ofertas. En el caso del panista ha puesto especial énfasis en que se eliminará la tenencia de los vehículos automotores y se bajará el costo del plaqueo de los mismos, lo cual es muy puntual y claro. Aunque no necesariamente refleje las necesidades más sentidas de la ciudadanía.
    Por su parte, el priista ha insistido en una policía única, lo cual ha sido descalificada de inmediato y reiteradamente por el panista,  con el argumento de que una sola policía en le entidad sería fácilmente cooptada por el crimen organizado, ya que sólo bastaría corromper a una persona o bien atemorizarla, para tener el control de la corporación o por lo menos dejarla minusválida.
    El panista ha sido temerario en alguna ocasión, por ejemplo cuando prometió una universidad para cada municipio, lo cual por lo menos es innecesario en la mayoría de los casos e inviable económicamente. Por el mismo rumbo  están las promesas de uniformes gratuitos a los escolares y transporte en las mismas condiciones.
    Duarte Jáquez por su parte ofrece apoyo a las actividades primarias y en especial ha sido concreto con el impulso a la ganadería, área que indudablemente conoce, sin embargo, parece temeraria su propuesta de apoyo al ramo para que pase de ser el punto ocho por ciento del producto interno bruto a un 15 por ciento del PIB, suena muy bien, pero mejor sería que adelantara cómo se puede lograr una proeza económica como la enunciada.
    Los electores saben que en los períodos electorales lo que sobran son promesas, bueno sería sin embargo que se diera un paso adelante en la oferta electora y se diga cómo se van a lograr las cosas y cuánto cuestan.
    No ahondemos  en otros ofrecimientos, que Carlos Borruel diga cuánto cuesta dar uniformes y transporte gratuito a los escolares de la entidad y también cuánto costará al erario público el no cobrar inscripciones en las primarias… lo de las universidades lo dejamos como algo anecdótico.
    Igualmente bueno sería que Duarte Jáquez, se extienda en las explicaciones para demostrar las bondades de una policía única y que diga cómo se puede lograr la proeza de aumentar en más de mil quinientos por ciento la actividad ganadera en la entidad.
    Los mexicanos en tiempos electorales escuchamos muchas promesas, ya es tiempo de que se explique cómo se realizarán.