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martes, 20 de marzo de 2012

Tras los pasos de Eduardo Margolis


1.- El proyecto de resolución del Ministro Arturo Zaldívar, que en su ejecución  significaría simple y llanamente la liberación de la francesa Florence Cassez, quien purga una condena de sesenta años, acusada de secuestro, es un evento de capital importancia para el sistema jurídico mexicano. El Ministro presidente de la primera Sala de la Suprema Corte de Justicia, está haciendo historia y marcando precedentes sobre la impartición de justicia en nuestro país. Los elementos con los que cuenta el Ministro Zaldívar,  son únicamente un expedientes lleno de vicios e inconsistencias, que han sido la constante en el sistema penal de México, una gran fábrica de evidencias, que no necesariamente de culpables, pero también de estos últimos, es un «modus operandi» en el sistema de procuración de justicia, que opta por los chivos expiatorios  al camino más arduo de la investigación y búsqueda del culpable.

2.-El activista Eduardo Gallo, quien estudió exhaustivamente el expediente del caso de Florence, luego de meses de estudio y búsqueda de explicaciones, es contundente: «es inocente». El investigador, académico y periodista Héctor Mauleón es más precavido, en un extenso trabajo de investigación publicado en la edición de julio de 2011 en la revista Nexos, cuyo título es «La verdad secuestrada», concluye que en los trece tomos y miles de fojas del expediente no se puede concluir sobre la culpabilidad de Cassez, ni tampoco de su inocencia. Lo que queda en claro es el manipuleo de pruebas, la inducción de testigos y el «modus operandi» histórico de la policía mexicana, que se va por la vía fácil de fabricar culpables y manipular pruebas. Es claro, en estricta aplicación de la ley, la francesa debe quedar libre.

3.- El primer error de los agente de Genaro García Luna, fue el montaje que para televisión se hizo, con por lo menos la participación de su hombre de confianza Cárdenas Palomino. También es comprobable que el testigo estrella que hoy se pasea por todas las televisoras en horario estelar: Ezequiel Elizalde, no era un secuestrado y hay líneas de investigación, que podrían llevar a que su padre era socio de Israel Vallarta y por ello tanto su padre como su madre, luego de que éste fue secuestrado por Vallarta, para cobrar un dinero, de algún trabajo conjunto, ambos desaparecieron, el padre se fue a los Estados Unidos y la mamá a bajar el estrés al solar familiar en la región lagunera. Las declaraciones de Ezequiel son contradictorias desde su primera versión hasta su recorrido por los noticieros, para Héctor Mauleón, es el menos confiable de los testigos.

4.-En el expediente, dice quienes a profundidad lo han estudiado, aparecen y desaparecen nombres y testimonios, que son clave, como el de Eduardo Margolis, quien fue socio en su empresa privada de dar seguridad, sobre todo a clientes de la colonia judía en el Distrito Federal, de Sebastián, hermano de Florence Cassez. Y Margolis, quien aparece  en el expediente, tiene viejos nexos con Isabel Miranda de Wallace, lo que podría explicar el afán de la candidata panista al gobierno del Distrito Federal, por evitar la liberación de Cassez. Margolis es un personaje oscuro, elusivo, quien al parecer pertenece o fue parte del Mosad, la detención de Florence se da a los cinco meses de que Margolis y Sebastián rompen la sociedad. Isabel Miranda ha demostrado públicamente su aprecio por este oscuro personaje a quien le achacan también gran amistad con García Luna y la planeación de la detención de Florence… aún falta mucho por saber. (Rodrigo Borja).

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