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martes, 20 de marzo de 2012

Urgen los dos mil millones


Por toda la ciudad, incluso por las zonas a las que a los comerciantes les ha dado por llamar «doradas», los vehículos circulan por un pavimento en lamentables condiciones, es posible hallar grandes baches, incluso en las avenidas de gran circulación y llamadas rápidas, como la Ejército Nacional, en donde los baches se repiten uno tras otro en espacios de menos de cien metros.


La cinta asfáltica de toda la ciudad se encuentra en tan lamentables condiciones como el creciente abandono de la zona centro o los múltiples desarrollos inmobiliarios del sureste de la ciudad, en donde cientos de mini viviendas están no únicamente abandonadas, sino saqueadas, en simples tapias, porque hasta los marcos de puertas y ventanas se han robado.


El creciente deterioro del equipamiento urbano en Ciudad Juárez es desalentador. No hay explicación, por lo menos creíble, del porque se ha abandonado el proyecto de revitalización del centro histórico, que arrancó hace por lo menos siete años, con la compra y derrumbamiento de múltiples fincas, sobre todo en la zona de tolerancia de Ciudad Juárez ubicada entre las calles Santos Degollado e Ignacio Mariscal.


Tampoco está claramente explicada la suspensión de la construcción del Centro de Convenciones y por lo menos se está trabajando con gran lentitud en la tramitación del préstamo de dos mil millones de pesos, pagadero a veinte años, que fue autorizado por el cabildo, para ser aplicado al pésimo pavimento de la ciudad, la cinta asfáltica se encuentra en condiciones tales que el noventa por ciento de el préstamo en cuestión, se destinaría a reparar las vías ya pavimentadas y sólo un diez por ciento a nuevas vialidades, lo cual nos da idea de la gravedad de la situación.


Ya ha pasado más de la mitad del actual trienio de Teto Murguía el gobernador está por terminar su primer tercio y las cosas en Juárez, no únicamente no mejoran, sino que se nota un desdén por hacerlo, o por lo menos las cosas se están tomando con mucha calma, como si la ciudad tuviera tiempo, es tan grave el rezago en equipamiento urbano y tan acelerado su deterioro que lo que menos tiene Ciudad Juárez es tiempo, ya lo hemos dicho en este espacio y no nos cansaremos de repetirlo.  Editorial NO. 1024

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