Riberas del Bravo

Hace unos cuantos días los medios de comunicación dieron cuenta de la negativa de los policías municipales de entrar a Riberas del Bravo, zona habitacional como poco más de diez años de existencia, que se ha convertido en el lugar más inseguro y peligroso de Ciudad Juárez.

El dato de que la policía se niega a entrar es más que relevador. Riberas del Bravo, es un buen ejemplo de falta de visión y planeación urbana y aun peor que eso, es un ejemplo de falta de interés por el bienestar de los juarenses por parte de sus gobernantes. 

Actualmente la zona que en un desaforado crecimiento alcanzó a tener tantas adiciones que terminó por ser un centro de población con miles de viviendas y centenares de miles de habitantes, está paradójicamente deshabitada y cientos de sus viviendas o millares probablemente, se encuentran vandalizadas.

Cuando decimos viviendas somos muy benévolos, ya que son mini casas, con la infraestructura urbana mínima, no hubo desde su concepción espacios públicos adecuados, ni escuelas suficientes, ni parques, ni bibliotecas, en fin más bien fue construida como un almacén de mano de obra para las maquiladoras que aún vivían momentos de crecimiento. 

En el gran problema social que representa hoy Riberas del Bravo, tiene que ver con la caprichosa forma de gobernar de Patricio Martínez, actual candidato a senador por el Partido Revolucionario Institucional, quien en la ciudad de Chihuahua, no admitía que se le tocara ningún árbol, pero que su visión para Juárez fue totalmente opuesta, lo mejor que le pudo pasar a la capital es que durante 12 años haya estado al cuidado de Martínez García, quien como alcalde demostró su amor por su ciudad natal. Fue un ex alcalde metiche y posteriormente un gobernador que hizo todo por su ciudad… en contraparte dejó de hacer en la ciudad fronteriza y lo que hizo fue sentar las bases para algunos de los más graves problemas sociales y urbanos que tenemos actualmente, como es la dispersión urbana y concretamente el fenómeno de inseguridad en Riberas del Bravo. Todo empezó con El mezquital, pero ese es otro tema.

Riberas no sólo es un lugar inhóspito para vivir por su falta de equipamiento urbano y las casas tan pequeñas que son un detonante de la disolución familiar, habría que agregar a lo anterior que la zona en la que fue construida era un vaso natural para las aguas de lluvia y su cercanía con el canal de aguas negras lo convertía en un lugar insalubre.

Actualmente es peligroso adentrarse por las noches en la enorme colonia y de día es muy triste ver como la yerba invade las casa abandonadas, en tapias prácticamente y con los pocos habitantes que les quedan obligados a seguir allí por falta de posibilidades económicas para dejar el lugar o bien empeñados en cuidar del patrimonio familiar… Riberas del Bravo, requiere de un plan especial de rescate en todos los sentidos, pero sobre todo en el  social.

Editorial…1025