«Teto»: a prueba su popularidad

En la ciudad de Chihuahua han fracasado

 Por Rodrigo Borja

            Como lo vaticinamos, la selección de candidato en Juárez, podría acabar la frágil «unidad» priista… así fue. Quedó claro que el encono provocado por José Reyes Ferriz en el gobernador José Reyes Baeza, fue superior a la antipatía que siempre le ha provocado Héctor Murguía Lardizábal y que en algunas ocasiones no se ocupaba de ocultar.

            Ante la imposibilidad de lograr la candidatura del Partido Revolucionario Institucional para Víctor Valencia de los Santos, a quien ni cómo ayudarlo, luego de su «Fraude Honoris Causa», como cabeceó el portal de Internet La polaka, quien dio a conocer el fraude de Valencia de los Santos para lograr su licenciatura.

            El empecinamiento del gobernador cedió y urdió como vengarse del supuesto «sobre mi cadáver» que se dice, dijo el alcalde sobre la candidatura de Víctor Valencia de los Santos, al cambiar de gallo por Héctor Murguía Lardizábal, quien sólo se lleva ligeramente mejor con el alcalde Reyes Ferriz que Valencia de los Santos… pero eso sin puro candidato de unidad en el PRI.

Baño de agua fría

Con todo y los abrazos y las levantadas en vilo de César Duarte a «Teto» Murguía en los eventos partidistas, la noticia que se confirmó al filo de las nueve de la noche del martes nueve de marzo, cayó como una bomba en los primeros círculos de César Duarte, quien había mostrado simpatías por la candidatura de Enrique Serrano Escobar.

La candidatura de Héctor Murguía, se impuso a la fuertemente apoyada por el alcalde de Guillermo Dowell y a la indefendible de Valencia, y por supuesto a la mencionada de Serrano.

La candidatura ya es oficial y el hoy candidato del PRI a la alcaldía de Juárez, lanzó un discurso muy admonitorio y amenazante, de esos que no allegan votos: habló de ir por los traidores y los desleales, palabras más palabras menos.

Al parecer el gran argumento para repetir como candidato a Héctor Murguía es la popularidad de la que goza en Juárez, por lo que se da por hecho entre las filas tricolores su triunfo y que él mismo le allegara muchos votos a César Duarte para la gubernatura.

Dudas entren el cesarismo

Sin embargo, entre algunos de los allegados al candidato a gobernador del PRI, César Duarte, hay dudas sobre la popularidad de «Teto» Murguía, y alegan al respecto que en la anterior elección, en donde fue electo diputado, ganó por menos de 20 mil votos de diferencia cuando Cano Ricaud en Chihuahua, sacó cincuenta mil votos más, incluso manifiestan, pidiendo guardar la identidad, que sumando todos los votos de Juárez, no hacen los cincuenta mil que Cano, logró de ventaja a su contrincante el año pasado.

Lo cierto es que la «unidad» priista es más de dientes para fuera que real y ello lo pone en igualdad de circunstancias con el Partido Acción Nacional, aun cuando se hablaba de que la unidad es la fortaleza de los tricolores.

En Chihuahua han fracasado

En Juárez nunca se había dado el caso de que el PRI postulara a un ex alcalde con sólo la diferencia de un período, sin embargo, ya lo ha experimentado en la capital de Chihuahua, en donde en 1983 perdió Luis Fuentes Molinar, con todo y su popularidad y lo propio hizo Alejandro Cano Ricaud en el 2007, también habiendo dejado la alcalde sólo tres años antes con  un alto nivel de aprobación.

Quienes sí han logrado con éxito el lance son los panistas en Cuauhtémoc con Héctor Pérez Mendoza y en Camargo con  Carlos Aguilar Camargo.

Para Juárez es novedoso y de alguna manera fue sorprendente, porque aun cuando con anticipación el gobernador dejó de manifiesto que de no ser Víctor Valencia de los Santos, él quería a Murguía Lardizábal., lo cierto es que en los corrillos políticos había escepticismo.

Ahora, lo que se pone a prueba es la popularidad de Héctor Murguía Lardizábal, quien terminó su período hace tres años con altos niveles de aceptación y siempre estuvo muy cercano a la gente sobre todo en los barrios pobres.