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miércoles, 23 de mayo de 2012
Tras los pasos de… El Grupo Tango
1.- El Fiscal
Zona Norte Jorge González Nicolás, tiene un grave problema de deslealtades en
su equipo de trabajo, hay más de un colaborador de primer nivel que para todos
trabaja menos para el titular de la dependencia, por supuesto nos referimos a
su topoderosa secretaria Mirna Franco, quien en medio de una situación laboral
irregular, ya que cobra jubilación del Gobierno del Estado y trabaja bajo
contrato por un salario igual al de su jubilación, amén de que cobra la pensión
de su marido quien fue asesinado a rafagazos en estos tiempos de violencia,
cuando se desempeñaba como comandante del área de robo de ganado. Lo anterior
es simplemente anécdota, al compararse con el control que ejerce sobre el Grupo
Tango, una unidad oficialmente inexistente y que se supone es para dar
vigilancia a la familia del Fiscal General, quien vive en la vecina ciudad de
El Paso, Texas, es lógico suponer que la vigilancia se da cuando vienen a Juárez.
2.- Es un grupo
compuesto por 25 elementos, que tiene su base en el complejo C-4, y que entre
sus funciones reales están las de dar servicio de escolta cuando la topoderosa
Mirna Franco, lleva a su hija a la escuela a la vecina ciudad: la escoltan
hasta la línea exprés y ahí la esperan a su regreso todas las mañanas en que la
jovencita tiene clases. Lo anterior sería lo de menos, el Grupo Tango, quien es
controlado por el viejo policía Ranulfo Galindo, quien adquirió su experiencia
policíaca siendo mesero del salón de baile el Jaime´s, llamó para conformar al
grupo Tango a ex agentes de la policía municipal y de tránsito, que tienen un
común denominador, fueron despedidos por corruptelas de sus anteriores empleos,
el argumento para su recontratación ahora en la dependencia federal es que son
policías experimentados.
3.- Efectivamente
son muy experimentados, de hecho sus largas horas de ocio las ocupan en poner
retenes en donde extorsionan a roba carros o narquillos, de los no autorizados,
o sea los que no están arreglados, los que no tienen cobija, como se dice en el
argot de los policías y los ladrones, en donde los linderos suelen confundirse.
O sea su trabajo principal no es contra el crimen organizado sino contra los
criminales «free lance», que como sucede con las pequeñas empresas, son las que
más trabajos generan. La relación que existe entre el jefe del Grupo Tango y Mirna Franco, es como un juego de espejos, cada uno piensa que
está utilizando al otro y efectivamente así es, hay un arreglo de gana-gana.
Franco, por su parte tiene un grupo de 25 agentes a sus órdenes para cumplir
con los compromisos que tiene por ejemplo con el Consulado General de EE. UU.,
para quien colabora der una manera apenas encubierta.
4.- Ésta ultima
parte merece una reflexión más profunda y lo trataremos hasta que el espacio se
termine. Mirna Franco, quien reiteramos tiene a su incondicional servicio, a 25
agentes «fantasmas» del Grupo Tango, tiene una relación como la que Cuco
Rubalcaba tenía con las autoridades gringas, muy buena, es invitada
indispensable a los eventos del Consulado y recibe regalos constantes por parte
de las autoridades norteamericanas asentadas en Ciudad Juárez, que van de una
inocente bolsa de café de Starbucks, o el envío de comida preparada a la oficina
de restaurantes de renombre, hasta sabrá Dios qué, como se decía antes. Oficialmente
el Grupo Tango no existe, pero bien que hace su agosto en retenes propios e
irregulares; en ese mismo rango Mirna Franco es sólo una secretaria, pero su
poder es tal, que su relación especial con el Consulado la delata. (Rodrigo
Borja).
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