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miércoles, 16 de noviembre de 2011

Escenarios políticos


 La derrota de Calderón
Por Antonio Pinedo
Las elecciones en Michoacán, son una derrota de Luisa María Calderón, de su hermano el presidente y por supuesto del Partido Acción Nacional. Las condiciones previas al inicio del proceso electoral fue una confrontación entre el Gobierno del Estado de Michoacán y la Federación, o sea entre el PAN y el Partido de la Revolución Democrática.
Sin embargo quien salió ganador fue el candidato Fausto Vallejo, quien desde el inicio de las campañas era señalado por las encuestas de intención del voto, como favorito. Vallejo quien ha sido alcalde de Morelia por cuatro ocasiones, debe este triunfo también a la ciudad capital, ya que ahí sacó una ventaja de sesenta mil votos en números redondos y finalmente ganó por cincuenta mil sufragios.
 En el proceso pasó de todo, creció la inseguridad  que siguió siendo tema de la agenda local, recordemos que fue en esta entidad cuando Felipe Calderón inició su guerra el once de diciembre de 2006, a diez días de asumir la presidencia, con el envío de siete mil elementos de las fuerzas armadas.
Las elecciones en tierras purépechas son un ejemplo de cómo se puede gastar en forma desmedida en una elección así sea esta a una gubernatura, todos los candidatos rebasaron a ojos vistas el tope de campaña que era ligeramente superior a los 39 millones de pesos por cada contendiente.
 Todo el país ha sido testigo también del exceso y abuso de los medios electrónicos, del uso de programas televisivos nacionales pagados, entrevistas muy cómodas para los candidatos dispuestos a pagar, aparte de la tradicional compra y coacción del voto, añadiendo a las formas tradicionales de entrega de despensas, láminas, uso de programas y recursos públicos, las tarjetas electrónicas que condicionaban el voto a cambio de promesas, de acceso a programas sociales, cumplibles, en teoría, al momento de ganar la elección el candidato o candidata que las ofrecía.
No obstante lo anterior,  el día de la elección una ciudadanía ordenada y madura se expresó en Michoacán. Salvo algunos incidentes que llevó a detener a cerca de 50 personas por tratar de inducir el voto y el cúmulo de mensajes telefónicos el día de la jornada, violando la privacidad, llamando a votar por uno de los candidatos –en especial por la abanderada del PAN-, se terminó la jornada en paz.
 La ciudadanía, muy por encima de los partidos al final de la jornada sus candidatos de manera irresponsable, con resultados tan cerrados y desoyendo el consejo a destiempo de la presidenta del IEM de actuar con mesura ante la incertidumbre de los resultados, las tres fuerzas políticas más importantes en el estado se proclamaron ganadoras a partir de encuestas de salida muy temerarias.
Todos festejando el triunfo y esperando a que fueran las seis con un minuto para hablar de sus propias encuestas de salida y por supuesto de su triunfo.  Resultó al final del día que sólo el PRI al parecer tenía razón y se llevaba el triunfo, pero la actitud fue igualmente irresponsable en todos.
La participación ciudadana en la elección sería del 54%, superior a la lograda en la elección del 2007, que fue del 48% e igual a la de 2001, donde ganó Lázaro Cárdenas. Lo que confirma la madurez del pueblo michoacano.
¿Qué podemos esperar ahora?, bueno primero el conteo de las actas por parte de los consejos electorales del IEM, el miércoles, y luego la calificación de la elección realizada por el Tribunal Electoral del Estado y la entrega de la constancia de mayoría al ganador el  domingo próximo. Después, seguramente,  se promoverá la judicialización del proceso porque, seguro, nadie quedará conforme con los resultados e irán a los tribunales.
Tanto Calderón como Silvano Aureoles, candidato de Convergencia, anticiparon que acudirán a los tribunales para que sean anulados los comicios y acusaron al candidato del PRI de ser «un títere» de las bandas del crimen que operan en Michoacán, en alusión a La Familia Michoacana y Los Caballeros Templarios.

Voto Castigo

El analista Eduardo Huchim consideró que con la derrota de Luisa María Calderón, candidata PAN, significó un voto castigo para el mandatario nacional por las políticas fracasadas en su gestión.

«Esta derrota es un golpe duro al PAN y si bien las elecciones en Michoacán no son necesariamente un anticipo de lo que va a ocurrir en el plano nacional en la elección del presidente de la República el próximo año, sí es un golpe al partido de derecha que ha repetido en el gobierno nacional por segunda vez», destacó. 

Refirió que el desempleo y los altos índices violentos derivados del combate entre las fuerzas de seguridad y la delincuencia organizada, son parte de los problemas que más han deteriorado la imagen del jefe de Estado en su entidad originaria.

Cabe finalmente  señalar que en las ultimas dos semanas se dio una campaña que hacía creer que Cocoa Calderón, dejaba su tercer lugar y en sólo una semana se ponía diez puntos adelante del propio Vallejo, que había encabezado las encuestas y la construcción de un triunfo para la hermana del presidente se mantuvo hasta el mismo domingo de la elección; fue la única candidata que se encontraba arropada por todos los precandidatos presidenciales de su partido, un periodista chihuahuense amigo personal de Fausto Vallejo, daba un testimonio a sólo 48 horas de la elección, respiraba la derrota en el PRI, ante la andana de la Federación y su impresión del estado de animo de Fausto Vallejo, era el del condenado en espera de su sacrificio, los habitantes de la capital, que lo han hecho cuatro veces alcalde, lo evitaron y perdieron los Calderón, nos referimos a Cocoa y a su hermano.

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