La responsabilidad de los medios de comunicación

El sábado pasado las ocho columnas del diario Norte, fueron perturbadoras, dan cuenta  del plagio de una señora a manos de dos judiciales federales y una cómplice, como se dice en la jerga periodística El Diario, perdió la nota.

                Que agentes en activo o ex judiciales estén inmiscuidos en delitos, no es cosa nueva, de hecho desde su llegada a nuestra ciudad en 2008, aumentaron los delitos de secuestro y extorsión, pero no es el caso de este texto.

                El domingo siguiente en primera plana en la parte inferior izquierda El Diario consigna en un balazo en color rojo: Mujer inventó secuestro y luego la cabeza de la nota dice: “Resulta que los federales siempre no son plagiarios”, lo primero que un lector de ambos periódicos pensaría y los hay por cientos, es que Norte registró en forma equivocada el hecho.

                No obstante lo anterior, a cierre de la edición de Semanario el diario Norte vuelve a consignar en primera plana: “Falla intento de federales por evadir acusación de secuestro”. El Diario por su parte en la página 13 de la sección “A”, consigna: “Pese a presunto invento de plagio, acusan ante juez a dos ex federales”.

                El evento nos debe poner a reflexionar sobre la responsabilidad de los medios de comunicación en este momento de gran violencia en el país y particularmente en Juárez, no es posible que se falte a la elemental ética periodística, para tratar de ocultar la perdida de una nota. ¿Qué es más grave?, que un periódico por la razón que sea no consigue una nota por importante que esta sea y trate de tergiversar los hechos para ocultar su falla o que un par de judiciales federales que son arrestados en flagrancia en el delito de secuestro queden libres y no paguen de ser encontrados por un juez culpables por un delito que en Chihuahua, conlleva cadena perpetua.

                Todos los días en todos los diarios del mundo se pueden perder notas importantes, de ahí vienen los términos de “la traemos en exclusiva”, “ganamos la nota” y otros cuya idea central es la misma, es parte del oficio, lo que no es parte del trabajo es tratar de tergiversar los hechos para tratar de ocultar la ineptitud de un reportero, de un jefe de información, de un jefe de redacción o de un editor.

                Los medios de comunicación sean estos impresos, electrónicos o se encuentren el ciberespacio, son de interés público, tiene una responsabilidad social ineludible, la competencia es sana, es buena y obliga a los medios de comunicación a mejorarse. Pero por encima de la competencia y de los lauros de ganar notas, esta la ética y el compromiso con la sociedad y mayor responsabilidad tiene los medios que por su tiraje o audiencia son líderes en el mercado.

                Por último se debe registrar que los federales presuntamente inmiscuidos en este secuestro y actualmente en manos de un juez, son  Alberto Rosas Ortega, de 33 años y Adrián  Hernández Escudero, de 26, el primero entro a la corporación en 2007 y el segundo en 2008, ambos en plena Guerra de Calderón, quien evidentemente no tiene cuidado en el reclutamiento de sus policías. Por último la Secretaria de seguridad pública dice que fueron dados de baja hace  dos meses.

Editorial de la edición No. 1005